El teólogo y referente de Curas en Opción por los Pobres, Eduardo de la Serna, cuestionó este miércoles al Gobierno nacional y remarcó que el Ejecutivo nacional “se olvidó de los pobres”, en línea con el documento que desde la organización que dirige dieron a conocer en las últimas horas.
En el documento, los curas afirmaron que “las políticas, dictadas desde el exterior (políticas económicas, pero también de relaciones internacionales, de infraestructura, sociales y hasta educativas), no dan respuestas y alientan el desánimo”.
En diálogo con AM750, De la serna explicó que la iniciativa de lanzar un comunicado durante el día patrio surgió, sobre todo, de los curas del interior del país. Ellos fueron quienes elevaron el reclamo que luego terminó teniendo su redacción en el secretariado.
¿Qué dice el documento?
En el documento, los Curas en Opción por los Pobres advierten que “el Gobierno se olvidó de los pobres". "Que las políticas no los benefician en nada. Y le piden un cambio de rumbo", indicó De la Serna en declaraciones a AM750.
“Aunque no le tenemos miedo a meterle los pies en el barro de la política, nosotros no somos políticos. Somos curas y decimos que los pobres no están siendo tenidos en cuenta. Que, por favor, cambien el rumbo”, expresó De la Serna.
El teólogo señaló, en este punto, que un cambio de rumbo “significará cambio de nombres”. Y no disimuló sus críticas al ministro de Economía, Martín Guzmán.
“Nosotros no vemos de ninguna manera que el Gobierno defienda con firmeza la situación de los pobres. El ministro Guzmán dijo que no quiere enfrentarse con el poder, eso es un problema. Porque los poderes se están enfrentando con los pobres. Acá no hay inflación, hay infladores”, cuestionó.
Y agregó: “Arcor sube hoy un 10 por ciento. Hay que decir las cosas por su nombre. Este tipo es malo, mentiroso. No puede haber hambre en un país que produce alimentos para 650 millones de habitantes”.
Como hablar con la pared
Por último, De la Serna consideró que en muchos casos hablar con el Gobierno es como “hablar con la pared”.
“El diálogo es importante siempre y cuando haya un criterio de lo que significa. Nosotros en su momento criticamos el modo en el que la Conferencia Episcopal Argentina enfrentó un diálogo, poniéndose como garante, pero no siendo parte”, comenzó señalando.
Y explicó que dialogar es estar dispuesto a escuchar, y cambiar de opinión. “Si no es un eco. Es hablar con una pared. No tengo problemas con que el Presidente sea una persona a la que le gusta el diálogo. Me parece bien. Siempre y cuando defienda con firmeza sus cosas”, concluyó.