La ley de cannabis medicinal y cáñamo industrial podrían generar en la Argentina al menos 10 mil empleos directos nuevos en los próximos tres años. Así lo afirmó el ministro de Ciencia y Tecnología, Daniel Filmus, quien consideró que la norma representa "una alternativa productiva". Además, consideró una "gran noticia" su promulgación por su aporte a la atención de "un conjunto de enfermedades muy diversas".
Filmus señaló que el cultivo e industrialización del cannabis "demanda mucha mano de obra y abre una variedad de servicios y usos muy diversos" para desarrollar. En ese sentido, rescató el impulso que la ley dará a las economías regionales y mencionó el interés al respecto de La Rioja, Catamarca, Jujuy, Mendoza y San Juan, entre otras provincias, ya que "permite que la producción pueda hacerse en pequeña escala con gran productividad y que pequeños propietarios puedan desarrollar este cultivo".
En declaraciones a la radio AM750, el ministro advirtió además que "la pequeña escala, con el agregado de valor que le da la mano de obra especializada, permite un aumento del valor del cannabis muy importante". Al señalársele que el desarrollo del cultivo de cannabis podría generar unos 10.000 puestos de trabajo para el 2025, Filmus indicó que esa creación de empleo se dará "como mínimo", sin contar la cantidad de puestos indirectos.
Entre los puntos centrales de la norma aparece como objetivo central el de brindar un marco regulatorio para la inversión pública y privada en toda la cadena y complementar la actual legislación, la Ley 27.350, que autoriza el uso terapéutico y paliativo del producto. En el caso del cáñamo industrial, apunta a legalizar los eslabones productivos, los de comercialización y sus subproductos. El proyecto contempla también la creación de una agencia reguladora, un nuevo actor público, que oficiará como órgano rector y articulador de la cadena productiva del cannabis, y tendrá a su cargo las múltiples instancias de regulación involucradas: la Agencia Regulatoria de la Industria del Cáñamo y del Cannabis Medicinal (Ariccame).
En ese contexto, Filmus valoró la tarea de "las madres (de pacientes que requerían cannabis medicinal), las ONG y toda la comunidad que durante muchos años estuvo peleando para que esta ley pudiera salir". También recordó que durante la Presidencia de Mauricio Macri hubo "una primera ley, con una pésima reglamentación" y remarcó que la promulgación de la nueva ley recientemente anunciada "viene a subsanar los errores de la otra".
El presidente Alberto Fernández encabezó el martes el acto de promulgación de la Ley de Cannabis Medicinal y Cáñamo Industrial en un acto realizado en el Salón de las Mujeres de la Casa Rosada. "Es un paso en el acceso al derecho a la salud" y, a la vez, "un triunfo de la sociedad contra la hipocresía", señaló Fernández en el acto que compartió con el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, y la fundadora de Mama Cultiva, Valeria Salech, la Organización No Gubernamental que llevó adelante el reclamo por la sanción legislativa del proyecto.
El presidente aseguró que "el cannabis era para gran parte de la sociedad una palabra prohibida; pero las voces de unas madres llamaron la atención de muchos: podían resolver los problemas de la gente". Fernández agregó que contar con esta nueva Ley "es otro triunfo de la sociedad contra la hipocresía", porque a pesar de los prejuicios, permitirá "ayudar a resolver la salud de mucha gente que lo necesita y que probó que esos medicamentos le sirven y hacen más llevaderas sus vidas".