Esta semana Roberto Feletti renunció a la Secretaría de Comercio luego del traspaso de la cartera a la órbita del Ministerio de Economía, a cargo de Martín Guzmán. Al respecto, el exsecretario de Comercio Interior Guillermo Moreno aseguró que “hay que cambiar el presidente”, ya que el problema de la inflación no puede ser resuelto por Alberto Fernández. Además, pronosticó: “Vamos a una catástrofe política”.
“El Presidente no está apto para gobernar. El único país que cayó 10 puntos por la pandemia fue Argentina", apuntó Moreno en diálogo con Mediodía 750. En ese sentido, aseguró que el oficialismo no tiene posibilidades de ganar las elecciones presidenciales del 2023 ya que perdió en los comicios de medio término, en 2021, cuando aún no se había firmado el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional para el saldar la deuda que nuestro país mantiene con el organismo.
“Había que firmar otro acuerdo, donde quede claro quién pone la plata. Los únicos que pueden poner la plata son los terratenientes de la zona núcleo de la Pampa Húmeda, si no la ponen los jubilados”, afirmó Moreno. Además, consideró que en Argentina se van a aplicar retenciones a pesar de la negativa de la oposición y los sectores ganaderos, "antes o después de la catástrofe". “Argentina va a tener retenciones sí o sí, en nivel máximo porque lo definen los precios internacionales y tiene que ser acompañado de una Ley de Arrendamientos Rurales, porque los que tienen que poner la plata son los dueños de la tierra”, enfatizó.
La Ley de Acefalía
Durante la entrevista, y al igual que lo viene haciendo en distintas intervenciones, Moreno planteó que, en el marco de la democracia y para avanzar con medidas que eliminen la inflación y aumenten los ingresos, se debe aplicar la Ley de Acefalía. “La democracia tiene la capacidad de autocorrección, que es la Ley de Acefalía. El Presidente es legal y legítimo, yo no digo que no, pero fracasó, y el marco legal lo permite”.
La legislación mencionada por el ex funcionario fue promulgada en 1975, durante la presidencia de Isabel Perón, y permite dictar la línea sucesoria en caso de enfermedad, ausencia o renuncia.