Desde Amsterdam

El distrito de los museos de esta ciudad es una gran zona rodeada de parques y jardines, que une los museos Stedelijk, Van Gogh, el Museo de Arte Contemporáneo (Moco) y el Rijksmuseum, muy cerca uno del otro.

El Stedelijk, que contiene una colección deslumbrante de arte moderno y contemporáneo, presenta exposiciones temporarias de gran envergadura.

En estos días, se exhibe una enorme antología retrospectiva de la videoartista, ensayista y docente Hito Steyerl (nacida en Alemania en 1966), que abarca desde 1994 hasta la actualidad. Steyerl, considerada una discípula del cineasta Harun Farocki (1944-2014), es una de las artistas más destacadas e influyentes de los últimos años.

En sus ensayos y artículos, Steyerl analiza, por ejemplo, cómo sobre el arte orbitan no sólo el capitalismo neoliberal, las bienales, las ferias o internet, sino también la especulación inmobiliaria, el lavado de dinero, las off shore y la desregulación financiera (en el libro Arte Duty Free). También se centra en el capitalismo de la información, la creación audiovisual en la sociedad hipermediatizada, las nuevas formas de alienación, así como en el desplazamiento de la práctica y la imaginación política hacia las pantallas (en el libro Los condenados de la pantalla).

Como artista visual, desde mediados de los años noventa, su obra múltiple recurre a distintos materiales, tecnologías y narrativas para señalar sus preocupaciones sociales y políticas.

En sus primeros trabajos de los años noventa se ocupó de las asimetrías que supuso la reunificación alemana y sus consecuencias. Su obra también hizo foco en las estructuras sociales, el nacionalismo, el colonialismo, el consumo y la inmigración, tanto desde historias particulares como institucionales. Así, documentaba acciones callejeras, entrevistando a alemanes de larga data y a inmigrantes recién llegados, dando cuenta de la violencia civil, el antisemitismo, la xenofobia y el racismo, amplificados por la reunificación.

A partir de los años dos mil, sus obras se extienden hacia instalaciones de video arte y conferencias-performance. Su punto de vista amplía el contexto, que excede la circunstancia alemana y se hace global, junto con el estallido de las redes y la globalización de la economía.

En sus obras más recientes, la artista se centra fundamentalmente en la relación entre la avanzada tecnológica y su relación con las corporaciones y los gobiernos, como modo de reflexión sobre el poder y la responsabilidad social.

Aquí contamos algunos de los núcleos de la exposición.

En la serie “Hell Yeah We Fuck Die”, documenta diferentes pruebas de laboratorio que entrenan robots para “salvar gente en zonas de desastre”. Estas pruebas someten a los androides a situaciones notoriamente inhumanas, buscando la empatía del espectador. La instalación inmersiva aparenta ser un circuito de entrenamiento. Un video lleva al espectador a Diyabakir, el lugar de nacimiento del inventor y erudito Imail Abul-Iz al Jazari, del siglo XIII, que se dice creó un proto robot que podía tocar la flauta. La ciudad de Diyarbakir, en Turquía, es considerada la capital del pueblo kurdo y fue centro de la lucha por la autonomía kurda contra el gobierno turco. Las imágenes y el relato producen una suerte de arqueología de los robots para politizar y reunir el pasado con los conflictos del presente.

“La Torre” es un juego de computadora diseñado por la compañía ucraniana Program-Ace, que se se desarrolla en una moderna Torre de Babilonia. El esquema del juego tiene una base histórica: en los años ochenta, Saddam Hussein decidió reconstruir la ciudad de Babilionia, en un gesto de fuerte simbolismo político. Steyerl relaciona la guerra de Irak, la caída de la Unión Soviética y la invasión rusa a Ucrania en 2014. El juego de Program-Ace se aparta de las propuestas usuales de la empresa: renders de arquitectura de lujo para clientes internacionales ricos, y simuladores militares y de emergencia. El video está narrado por el ceo y diseñador de software de la empresa ucraniana.

La obra “Liquidez INC” fue realizada después de la recesión de EE.UU y los países centrales en 2008 y del movimiento Occupy Wall Street de 2011. La obra relaciona el agua con las desigualdades financieras (los movimientos de liquidez e iliquidez), el trabajo, la inmigración y la tecnología digital. El video está protagonizado por Jacob Wood, un ex analista financiero de Lehman Brothers, la firma de inversión que declaró su quiebra y fue uno de los síntomas que disparó la crisis económica de 2008. Después de quedarse sin trabajo, Wood se reinventó como luchador profesional de artes marciales.

El video, en su exploración de la metáfora líquida, incluye obras de las olas del grabador japonés Hokusai; imágenes y declaraciones del actor y maestro en artes marciales Bruce Lee; así como imágenes y renders 3D del océano, superpuestos con diagramas de la “nube” informática. El centro de esta obra es el capitalismo corporativo y la relación entre trabajo, lucha en la economía líquida.

La exposición “Sobreviré”, de Hito Steyerl, en el Museo Stedelijk de Amsterdam, sigue hasta el 12 de junio.