Tras el acuerdo al que arribaron los empresarios del sector del transporte público y los choferes del interior del país representados por la Unión Tranviarios Automotor (UTA), de subir los salarios un 50% como sucedió en abril en Capital Federal y su área metropolitana, ahora la Federación Argentina del Transporte Automotor de Pasajeros (FATAP) advirtió que si Nación no envía los subsidios comprometidos, no podrán hacer frente al pago del aumento y volverán los paros.
Salta ya vivió jornadas de caos en el transporte como consecuencia de la medida de fuerza que tomaron los choferes. El martes 10 de mayo duró solo medio día, porque la orden de conciliación obligatoria emitida por el Ministerio de Trabajo postergó el paro una semana más, y el 17 de este mes se paralizó todo el servicio de colectivos públicos.
Esa medida, anunciada por 72 horas, duró solo un día, ya que el 18 se garantizó la movilidad debido a que ese día se realizaba el Censo 2022, y esa misma tarde se rubricó un acuerdo en el que el empresariado aceptaba la exigencia sindical para equiparar los salarios a los del AMBA.
Sin embargo, este fin de semana el tema se reavivó, debido a que desde la Federación denuncian que el gobierno nacional, a través del Ministerio de Transporte, aún no realizó los depósitos correspondientes con los que pueden hacer frente a los pagos.
El viernes pasado la primera provincia en retomar el paro de actividades fue Corrientes, "si los fondos no vienen desde Nación, no podemos pagar", lanzó Gerardo Ingaramo, presidente de la Federación Argentina del Transporte Automotor de Pasajeros. Y agregó que "El paro de Corrientes puede continuar en otras provincias”.
El representante aseguró que a la hora de acordar el aumento salarial, la cartera de Transporte se comprometió a abonar dos cuotas de 7 mil millones de pesos más un aporte extra para todas las jurisdicciones del interior. Algo que aún no sucedió y se acerca la fecha de pago y de aguinaldos.
En Salta, el presidente de la Sociedad Anónima del Estado de Transporte Automotor (SAETA), Claudio Mohr, en diálogo con Salta/12, confirmó los dichos del titular de la FATAP y agregó un dato que tiene molestos a todos en el sector, y que tiene que ver con la falta de transparencia “en las formas de calcular los subsidios en la distribución de los mismos de manera federal”.
Mohr destacó que a todas luces se puede ver la injusticia reinante entre la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y alrededores y el resto del país. Esa jurisdicción recibe el 82% de los subsidios al transporte a los que se suman otros como el de combustible, mientras las restantes 23 jurisdicciones se reparten apenas el 18%.
“Estaba comprometido que Nación debía ponerse al día con la distribución de subsidios”, expresó. Según Mohr, para el caso de Salta, el retraso es de más de 30 días en el traspaso de esos fondos, “y no lo están haciendo, así como tampoco nos dicen cómo se calcula el magro subsidio que recibe el interior del país”.
Mohr aclaró que en el caso local, “al tener las previsiones hechas y las cuentas ordenadas”, pudieron pagar el primer aumento comprometido para el 25 de mayo, “pero si los subsidios no se regularizan y distribuyen de mejor manera, en algún momento vamos a vernos afectados como está sucediendo en otras provincias”.
Mohr no desconoció que el pedido de los trabajadores sea justo, pero indicó que a ese aumento se le suman otros derivados de la inflación, como tres aumentos de combustible en lo que va del año, y toda una batería de insumos del automotor como neumáticos, aceite y repuestos.
“Nos quedan pocas opciones”, manifestó, y dijo que por eso están analizando volver a subir el boleto, algo que se analizará entre junio y julio junto a la Autoridad Metropolitana de Transporte (AMT), aunque entendió que “sea cual fuere el aumento, nunca va a alcanzar a cubrir los costos de la operación si no llegan los subsidios”. “No estamos pidiendo cosas imposibles, sino una más justa redistribución de los recursos para que el boleto no tenga que salir lo que pagan en Córdoba, Bariloche o Mar del Plata, cuando en Buenos Aires pagan todavía $18”, afirmó.
“Es una aberración que las partes más pobres estén subvencionando a la más rica del país, abonando y contribuyendo como siempre al centralismo”, añadió el titular de SAETA.
Para Mohr, se debería reajustar la tarifa del AMBA a valores similares al promedio del país, “y ese subsidio que ellos podrían liberar es el que se redistribuiría en las provincias”. Y subrayó que eso no significaría mayor erogación para el Estado: “no pedimos incrementar el subsidio, sino redistribuirlo de mejor manera”.
Al día de hoy, Transporte de la Nación le debe a Salta la cuota de mayo, pero a otras jurisdicciones se les adeuda también abril, “siempre vamos un mes atrás y eso también complica cumplir con los compromisos”, esgrimió el funcionario.
Salta recibe aproximadamente $200 millones mensuales de subsidios del gobierno central, que tiene un porcentaje de incidencia de alrededor del 20% de los costos de mantenimiento del servicio en general, “pero si el proceso inflacionario se sigue dando, ese porcentaje va a ser menor”, concluyó Claudio Mohr.