Gritó “¡esto es por Siria!” y le pegó con un martillo a un policía cerca de la catedral de Notre Dame, antes de ser reducido. El atacante se acercó por detrás a una patrulla y golpeó a uno de los tres agentes que estaba en el lugar. Uno de los policías abrió fuego contra el agresor, que fue trasladado al hospital. El agente fue herido pero no de gravedad. El agresor confesó luego ser un “soldado del califato del Estado Islámico”, informó el canal BFMTV. “La situación está controlada, un policía resultó herido, el autor de los hechos fue neutralizado y llevado a un hospital”, informó la Prefectura Policial de París.
Según el ministro de Interior francés, Gérard Collomb, el hombre que agredió a los martillazos contra el policía parisino dijo ser un estudiante argelino y llevaba un carnet cuya autentidad aún debe verificarse. Las autoridades consideran el suceso como un acto terrorista y la Fiscalía de París, encargada de estos asuntos, abrió una investigación que fue confiada a la sección antiterrorista de la Brigada Criminal y a la Dirección General de la Seguridad Interior (DGSI). El atentado devuelve a París la amenaza del terrorismo cinco días antes de las elecciones legislativas.
Testigos citados por el diario Le Monde dijeron que el hecho ocurrió a las 16.15 hora local, y confirmaron que patrulleros y ambulancias se acercaron rápidamente al lugar, que fue cercado. Además del martillo, el atacante llevaba cuchillos de cocina, lo que muestra que los ataques contra las fuerzas de seguridad se realizan con instrumentos muy corrientes, dijo el ministro del Interior. “Hemos pasado de un terrorismo sofisticado a otro en el que cualquier herramienta puede ser utilizada como arma”, consideró Collomb.
El hombre actuó solo en el momento del ataque, aunque las fuerzas de seguridad investigan si tenía cómplices. El atentado de ayer es semejante a recientes ataques en la capital francesa, como el del 20 de abril, tres días antes de la celebración de la primera vuelta de las elecciones presidenciales, en la avenida de los Campos Elíseos, otro de los epicentros turísticos de París. En aquel ataque murió el policía Xavier Jugelé, tiroteado por un jihadista que fue posteriormente abatido por las fuerzas del orden.
La catedral de Notre Dame fue escenario de otro atentado frustrado el 9 de septiembre del año pasado, cuando la Policía desarticuló un comando compuesto por mujeres y dirigido por el Estado Islámico (EI), desde Siria, que intentó estallar un coche junto a Notre Dame y luego trató de perpetrar un atentado contra agentes policiales. Francia permanece en estado de emergencia, con la presencia de patrullas militares por las calles de París, desde que los atentados del 13 de noviembre de 2015 causaran 130 muertos y cientos de heridos en las calles de la ciudad y en la sala de conciertos Bataclan.