Una médica del Hospital Penna que atendió a la joven que denunció al futbolista colombiano Sebastián Villa por haber abusado sexualmente de ella el año pasado en su casa de un country de Canning, aseguró hoy que el certificado médico firmado por ella refiere que se trató de un examen ginecológico normal y recordó que la víctima no mencionó haber sido atacada. Por otro lado, la AFA a través de su Departamento de Equidad y Género sostuvo que Boca "tiene que separarlo" a Villa del plantel mientras se desarrolle la instancia judicial.
Fuentes judiciales aseguraron a Télam que la médica ginecóloga agregó en su testimonio ante la fiscal Vanesa González, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucciones (UFI) 3 Especializada en Violencia Familiar y de Género, Abusos Sexuales y Delitos Conexos a la Trata de Personas de Lomas de Zamora, que durante la revisión no se advirtió que la paciente haya podido haber sufrido un abuso y agregó que se trató de un examen normal.
El testimonio de esta médica, de apellido Santa Cruz, coincide con lo que había relatado la semana pasada su colega Renée Legrand, quien también había firmado el certificado médico del Hospital Penna del 27 de junio del año pasado, cuando la joven de 26 años concurrió a atenderse.
Legrand había asegurado que no recordaba a la víctima porque atiende a 35 mujeres por día, aunque reconocía que el certificado de atención había sido firmado por ella y por su colega Santa Cruz y que allí señalaba que los estudios realizados eran normales.
Para los investigadores, la declaración de las dos médicas eran consideradas "clave" ya que la víctima había asegurado que las doctoras que la atendieron le habían sugerido realizar la denuncia por abuso sexual tras revisarla, algo que no pudo ser corroborado por las profesionales.
En tanto, la fiscal González incorporó al expediente la declaración de dos efectivos de la policía bonaerense que tampoco pudieron aportar muchos detalles sobre el presunto abuso sexual del 26 de junio del año pasado en el country "Venados II", donde vive el futbolista de Boca Juniors.
Es que estos policías dijeron que no recuerdan haber concurrido al country aquella noche ante una denuncia por abuso sexual, tal como lo había asegurado la joven que denunció al delantero xeneize.
La víctima del hecho había asegurado a los investigadores que esa noche estuvieron en la puerta del country dos policías a bordo de un patrullero tras un llamado al 911 y hasta aportó a la fiscal la captura de pantalla de dos diálogos de chat en los que Villa supuestamente le decía que, ante la presencia policial, él tenía que "arreglar" a los efectivos que concurrieron para no "meterse en problemas".
Sin embargo, no solo los policías supuestamente involucrados dijeron no recordar haber concurrido al country, sino que un informe entregado en las últimas horas por el Ministerio de Seguridad bonaerense reveló que no existe llamado al 911 con las características señaladas la noche del 26 de junio del año pasado, dijeron las fuentes consultadas.
De todas formas, los investigadores señalaron que el informe del 911 puede no ser concluyente, ya que la llamada pudo haber sido realizada por algún vecino a la seccional policial directamente sin pasar por el teléfono de emergencias 911.
El primero de los policías que declaró ayer es el suboficial mayor Enrique Rubén Álvarez (59), quien se desempeña en el comando de patrullas de Esteban Echeverría y, según la testimonial a la que accedió Télam, solo dijo que en esa época él cubría “la cuadrícula 15” pero que no era frecuente ingresar a countries y solo lo hacían en el “Círculo Hebreo” y “para ir al baño”.
Cuando le preguntaron puntualmente si recordaba haber ido al barrio Venado II y si lo había hecho entre la noche del 26 y la madrugada del 27 de junio de 2021, respondió: “Tal vez sí, tal vez no, no recuerdo”.
El particular damnificado le preguntó si recordaba haber concurrido a un 911 en un caso relacionado con alguna persona pública, pero también contestó de manera ambigua: “Puede ser, pero no recuerdo, tal vez sí”.
El segundo policía en declarar fue Luis Guillermo Alfonzo (51), quien fue compañero de Álvarez hasta agosto de 2021 en el mismo Comando de Patrullas, y ante la pregunta puntual de si aquella madrugada concurrió por un 911 al country Venado II, respondió: “Puede ser pero no recuerdo el motivo, pudo haber sido”.
Pero cuando le repreguntaron si recordaba haber ido a un country por una situación con alguna persona conocida, contestó que “no” y cuando la defensa de Villa le consultó si se acordaría si hubiera sido convocado por un caso con una figura pública, respondió: “Sí, lo recordaría”.
La denuncia contra Villa fue presentada por escrito el 13 de este mes en la UFI 3 de Esteban Echeverría, y a los tres días la denunciante la ratificó de manera presencial en la fiscalía. La víctima contó que el hecho ocurrió la noche del 26 de junio de 2021 en el country "Venado II" de la localidad bonaerense de Canning, donde vivía el futbolista, y luego de un asado del que habían participado otros jugadores del plantel xeneize.
Según la denuncia, Villa había consumido "mucho alcohol" y comenzó a reprocharle que sospechaba que le gustaban o que había estado con otros jugadores del plantel.
Dijo que tras mantener una fuerte discusión, Villa la encerró en una habitación, abusó sexualmente de ella y la intentó sofocar. La joven presentó como prueba unos intercambios de mensajes donde Villa se disculpaba por lo sucedido y se justificaba diciendo que había "tomado mucho" y también denunció que el futbolista le envió 5.000 dólares para que no haga ninguna denuncia, suma que luego devolvió.
Por otro lado, Paula Ojeda, flamante gerenta del Departamento de Equidad y Género de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) sostuvo que Boca "tiene que separarlo" a Villa del plantel, además de "no dejarlo estar en la cancha hasta que se resuelva la situación judicial". "No estoy de acuerdo con la decisión del club de que siga jugando. Es uno de los motivos de mi trabajo, sensibilizar sobre estas cuestiones. Tenemos que seguir capacitando sobre estas cosas para que se tome conciencia, tener acciones para que la gente se pueda dar cuenta de lo que significa y que el fútbol debe ser un deporte que puede y debe estar libre de violencia", manifestó Ojeda en una entrevista periodística.
Y añadió: "Si hay una imputación de violencia de género la institución tiene que separarlo y no dejarlo estar en la cancha hasta que se resuelva la situación judicial. El club tiene que separar a Villa. Los clubes no son la Justicia pero si existe una imputación, es importante que la dirigencia separe al jugador para visibilizar el acompañamiento a la víctima y dar el ejemplo".
En esa línea, continuó: "Los jugadores son parte de la sociedad y tienen una responsabilidad. Niñas, niños y adolescentes no pueden estar gritando los goles de personas denunciadas. Los directivos del club no están dando un buen ejemplo. Si bien los clubes tienen autonomía en sus decisiones, deberían pensarlas mejor".
"Las decisiones políticas e institucionales van por encima de las decisiones de los departamentos de género. Mi llegada a la AFA es para reforzar a esos departamentos, darles más poder", cerró Ojeda.