Los 35 millones de dólares que Gianfranco Macri blanqueó en 2017, cuando el gobierno de su hermano Mauricio creó ese régimen de declaración de fondos ocultos en el exterior, no eran todos propios. Cerca de dos tercios de los mismos, unos 23 millones de dólares, le pertenecían a la madre de ambos, Alicia Blanco Villegas, cuyos bienes estaban inhibidos de participar en el blanqueo por prohibición expresa del propio régimen. La AFIP detectó dicha irregularidad y tiene en elaboración las denuncias a las que el irregular blanqueo dará lugar, por delitos de orden tributario y penal. Además de quedar comprometido el autor de la declaración jurada de blanqueo, por intento de engaño a la autoridad fiscal, también quedó expuesta la existencia del fideicomiso del que la viuda de Franco Macri y madre de Mauricio es titular, por un monto millonario no declarado. Podría ser el hilo desde el cual ir a la búsqueda de otros activos ocultos en guaridas fiscales y cloacas financieras del planeta.
Los cruces de información que realiza la AFIP sobre las bases de datos disponibles permitieron determinar la existencia de irregularidades en el blanqueo, en el cual la presentación de Gianfranco Macri alcanza ribetes escandalosos. En este caso, el intento de blanquear los bienes pertenecientes a una firma radicada en las islas Vírgenes Británicas, Reata Pacific Ltd. Esta empresa tiene a su vez una sociedad controlante, Quiñel Trust, constituida en Liechtenstein, a nombre de Alicia Blanco Villegas.
Pero resulta que la ley del régimen de regularización y exteriorización de bienes de 2017, el blanqueo, debió incluir la prohibición de participación de funcionarios públicos, sus progenitores, hijos y cónyuges. Zafaron los "hermanos", luego de que Cambiemos restringiera el criterio más amplio de proscripción que había propuesto el diputado por el Frente para la Victoria Axel Kicillof (llegaba hasta familiares en cuarto grado de parentesco).
El dictamen jurídico de la AFIP
Al detectarse que la presentación de Gianfranco Macri incluía, entre los bienes que pedía blanquear, un activo cuya propiedad real era de Alicia Blanco Villegas, la AFIP le solicitó a sus expertos jurídicos que analizaran el caso en particular y elaboraran un dictamen en relación a dos cuestiones específicas:
- Si un "beneficiario subsidiario" de un fideicomiso estaba habilitado para blanquear dicho patrimonio en el marco de la ley 27260, y en su defecto, si la madre de un funcionario excluido del blanqueo podía haberse acogido al mismo régimen.
- Cuáles serían los efectos de un blanqueo parcialmente improcedente. Esto es, si la impugnación debí extenderse a la totalidad de los bienes exteriorizados, o sólo a aquellos que se entienden improcedentemente blanqueados.
La respuesta dada por el dictamen jurídico de los especialistas de la AFIP a la primera consulta fue que "no estaban habilitados".
De acuerdo a las áreas jurídicas de la AFIP, sólo el beneficiario directo de un fideicomiso podía blanquearlo como parte de su patrimonio. De ese modo, al verificarse los requisitos exigidos por la ley, se concluyó que la exteriorización del fideicomiso no resultaba válida, por lo que dichos activos no quedan amparados por los beneficios del artículo 46 de la Ley 27260.
El dictamen jurídico también sostiene que la madre de un funcionario excluido del régimen de la ley tampoco podía haberlo hecho, aun siendo la beneficiaria directa del fideicomiso no declarado.
Con respecto a la segunda consulta, de forma igualmente tajante: la impugnación no alcanza a la totalidad de los activos blanqueados.
La consulta concreta está referida a si el cuestionamiento debía hacerse sobre todo el blanqueo presentado por Gianfranco Macri por 35,5 millones de dólares, o solamente sobre la parte considerada improcedente (aproximadamente dos tercios de esa cifra).
El dictamen de las áreas jurídicas de la AFIP sostiene que la ley de blanqueo 27260 reserva la pérdida de la totalidad de los beneficios para supuestos taxativamente enunciados. Supuestos que, para el caso de los activos exteriorizados aparte de los pertenecientes al fideicomiso del que la madre de Mauricio Macri era titular, no se verificaban.
La denuncia contra Gianfranco Macri y su madre
Las consecuencias en materia tributaria son que los bienes pretendidamente regularizados, por pertenecer a una progenitora (la madre) de un funcionario inhibido (Mauricio Macri), quedan excluidos del régimen y, al quedar expuestos, están sujetos al reclamo de los impuestos, multas y otros recargos en cabeza de su titular, Alicia Blanco Villegas, por parte de la AFIP.
Por otra parte, y según surge del mismo dictamen de las áreas jurídicas de la AFIP, se deben considerar decaídos todos los beneficios de no investigación (consecuencias "desincriminatorias") que otorgara el blanqueo de 2017 a favor de los bienes y titulares de activos declarados.
De ese modo, tanto la titular del fideicomiso oculto que se pretendió exteriorizar (Alicia Blanco Villegas), como quien pretendió incorporarlo en forma indebida al blanqueo (Gianfranco Macri) resultarán denunciados al ser considerados penalmente responsables de evasión y hasta podría caberle la acusación de intento de fraude por la fasificación de la propiedad de los activos para burlar una restricción de la ley de blanqueo.
La responsabilidad de Mauricio Macri
El fideicomiso Quiñel Trust, de Blanco Villegas, tiene como beneficiarios secundarios, a la muerte de su titular, a sus tres hijos varones: Mauricio, Gianfranco y Mariano. En el caso del primero, presidente al momento del blanqueo, los especialistas no descartan que la causa derive en una investigación sobre su eventual responsabilidad como partícipe de la maniobra de evasión y falsificación de la propiedad del fondo para su blanqueo.