Emiliano Martínez (6): Italia no le provocó grandes complicaciones. Pero cuando intervino, ratificó su solvencia. Su rodilla derecha resentida le causó más problemas que los delanteros italianos.

Nahuel Molina (6): En el primer tiempo jugó más retenido, sin ir tanto al ataque. En el segundo hizo lo que el equipo aguarda de él: se soltó mucho más, se prendió en el toque del equipo, y llegó arriba con gran convicción.

Cristian Romero (7): Ratificó su firmeza tanto de último hombre como saliendo a cortar lejos del área. Respaldó bien a Molina cuando fue a cruzar a sus espaldas. Cada vez más asentado en su posición.

Nicolás Otamendi (7): Salió a tomar a los delanteros de punta de Italia y en una de esas marcaciones fue amonestado. En el segundo tiempo, con menor exigencia y mayor serenidad, ya no tuvo que ir tanto al choque, levantó la mirada y cruzó un par de buenos pases largos para Di María.

Nicolás Tagliafico (8): Uno de los mejores. Controló en la marca al zurdo Bernardeschi evitando que se le fuera hacia adentro, y tuvo resto para cortar la cancha en diagonal y proyectarse en ataque. Se ofreció siempre como salida y estuvo acertado con la pelota. 

Rodrigo De Paul (6): Muy activo. Pero esa misma ansiedad lo llevó a desordenarse y a apurarse en algunas jugadas. No aportó en el quite y la recuperación cuando Italia pudo manejar la pelota en el primer tiempo. En el segundo, se sumó al toque y más sereno, rindió mejor hasta que lo reemplazó Palacios.

Guido Rodríguez (6): Jugó delante de la línea de cuatro y cuando salió más al medio en la primera etapa, tampoco se hizo fuerte a la hora de conseguir la pelota. Con el crecimiento del equipo en la segunda parte rindió mejor, pero sin brillar casi nunca.

Giovani Lo Celso (7): Arrancó demasiado pegado a la raya izquierda y eso le restó protagonismo en la media hora inicial. Cuando se corrió al medio, tuvo mayor participación y además, tapó los arranques con y sin pelota de Jorginho. Participó del primer gol argentino y pudo haber anotado otro en el segundo. Cuando él juega bien, Argentina juega mejor.

Lionel Messi (9): Lo único que le faltó fue anotar un gol. Lo buscó con ansiedad y tres veces el arquero italiano Donnaruma (su compañero en el PSG) le ahogó el grito. Después, hizo un partido completísimo, irreprochable. Le sirvió el primer gol a Lautaro Martínez, intervino en la jugada del tanto de Dybala, fue a buscar la pelota más allá de la mitad de la cancha, encaró, pasó, tocó y fue a buscar. En ningún caso se vio a un jugador disminuido por sus 34 años y ratificó, por si alguna duda quedaba, su permanencia en el podio del fútbol mundial.

Angel Di María (9): Empezó volcado por la derecha, sin intervenir mucho en el juego. Después de definir brillantemente en su gol, tocando por encima de la salida acaso tardía de Donnaruma, creció en confianza, se soltó, anduvo por todos lados y resultó imparable. Voló sobre la cancha, pudo haber anotado no menos de dos goles más y hubiera sido merecido. Otra actuación consagratoria. 

Lautaro Martínez (9): Jugó un gran partido. Cada aparición suya fue clave. En el primer gol, cacheteó con el revés de su botín derecho el pase preciso de Messi que fue a buscar con gran determinación. Y en el segundo, todo lo hizo bien: aguantó con el cuerpo a Bonucci y luego, le puso un delicioso pase gol a Di María. Después, viniendo desde atrás, participó de muchas de las mejores jugadas del segundo tiempo. Armó juego, definió y ratificó su nivel de delantero de primer orden.

Exequiel Palacios: Reemplazó a De Paul y sin brillar también aportó al toque. 

Germán Pezzella: Entró por Romero. El partido ya estaba definido y lo único que tuvo que hacer fue sacar la pelota bien jugada desde atrás.

Julián Alvarez: Ingresó por Lautaro Martínez y en la primera pelota que tocó quiso hacerle a Donnaruma un gol casi desde la mitad de la cancha. Jugó apenas 10 minutos en los quiso hacer todos los méritos juntos para ir a Qatar.

Paulo Dybala: Jugó el tiempo adicional en lugar de Lo Celso y en la única pelota que tocó, marcó el tercer gol argentino con un tiro muy ajustado al palo izquierdo de Donnaruma.

NIcolás González: Sustituyó a Di María. Sólo jugó los cuatro minutos de prórroga.                  

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