El 27 de abril la mamá de Arcoiris se presentó ante Asuntos Juveniles para dejar en una exposición constancia de que su hija expresa que “no quiere ir a la casa de su padre porque tenía miedo”. La niña debía volver con su padre por el régimen establecido, pero no quiere hacerlo.
La semana pasada se conoció que fue firmada una orden de detención por desobediencia a la autoridad y por lo que su abogada defensora, Élida Barrera, presentó una eximición de prisión ante el Juzgado de Violencia de Género y Protección Integral de Menores Nº 2, en el expediente caratulado “Desobediencia a la autoridad, impedimento de contacto con sus hijos menores con sus padres no convivientes”.
La causa, que se inició en La Rioja por denuncias de abuso sexual, régimen de cuidados y alimentos, se tramitan tanto en lo penal como en lo civil registró una novedad y es la denuncia por comisión de delito de desobediencia a la autoridad realizada a la madre que, en cinco oportunidades, denunció que el abuelo paterno, "J.V.", abusó de la menor desde que tenía dos años y medio.
La última denuncia fue realizada el 20 de abril y que se suma a las presentaciones realizadas el 14 de marzo de 2022 ante la Unidad de Violencia de Género y el 1 de abril en Asuntos Juveniles. Estas, se suman a dos denuncias anteriores realizadas en junio de 2018 y agosto de 2019 que tiene fallo de sobreseimiento apelado ante el Tribunal Superior de Justicia.
La orden de detención contra la madre fue presentada el 26 de mayo ante el juzgado a cargo de la jueza Gisela Flamini ante la denuncia del padre de la niña. Barrera confirmó a La Rioja/12 que el pedido de detención “fue firmado por la fiscal Nadia Schardrovsky” del Ministerio Público Fiscal.
“No hay impedimento de contacto, lo que no hay es seguridad jurídica para una niña que refiere que no quiere ir con el padre”, aseguró la letrada. En el escrito presentado dejan sentado que la madre “no se encuentra comprendida por ninguna de las causales previstos en el artículo 337 del CPP, no posee antecedentes, ni condenas, ni modo de vivir inmoral y que pertenece a una familia de trabajadores”, dice la solicitud a la que tuvo acceso este diario.
“No hubo desobediencia a la autoridad y la niña, por la que se denuncia de la desobediencia, no se encuentra en condiciones de asistir a clases y muchos menos de ser vinculada con su progenitor por las denuncias realizadas en su contra. La revinculación es una medida que se trata en sede civil y existe una medida cautelar presentada el 28 de marzo de este año”, expresa otra parte de la presentación. En la medida cautelar se solicita que se restituya a la niña donde ella considera su centro de vida; se suspenda el régimen de cuidado a favor del padre y se dicten medidas de protección no solo en contra del abuelo, sino también del padre y su entorno.
Respecto de la escolarización, Barrera explicó que "la niña tiene miedo porque de la escuela la busca el padre y luego tiene contacto con el abuelo" quien tiene medidas de restricción y no puede acercarse.
Carta al gobernador Quintela
El equipo de Justicia por Arcoiris junto a un grupo de personalidades y organizaciones de la sociedad civil enviaron cartas al gobernador Ricardo Quintela, al Tribunal Superior de Justicia de La Rioja, el SENAF (Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia) y el Ministerio Público Fiscal, para manifestar la preocupación por el caso y solicitar medidas urgentes que “garanticen la protección e integridad psicofísica de la niña y de la madre hostigada por negarse a entregarla, siendo imputada penalmente por impedimento de contacto; y que se investiguen las denuncias por abuso sexual”.
“Lamentablemente, el 26 de marzo la jueza (Jésica) Díaz Marano ha archivado una de las causas de abuso sexual, al tiempo que la jueza (Gisela) Flamini fuerza a la madre a entregar a su hija al entorno abusador, pese a las pruebas de ASI de tipo 2 y el contundente relato de la niña. Reiteramos nuestro sincero y firme pedido de acompañamiento real y efectivo a las instituciones intervinientes”, afirma el escrito.
Recuerdan además que “desde las cuentas oficiales de redes sociales y la misma página web del Tribunal Superior de Justicia de La Rioja se publicó un comunicado carente de fechas, sin firmas, ni referencia, en donde se volcó información sesgada, incorrecta y falaz, intentando culpabilizar a la madre y salvar la reputación de esta entidad, siendo lo más gravoso el adelanto de criterios de resolución sobre causas abiertas, en investigación, antes que se resuelva la instancia judicial correspondiente.
Nos preocupa, por una parte, el retardo procesal, en este caso en particular, tratándose de un delito de abuso sexual perpetrado contra una niña tan pequeña, en 3 oportunidades denunciadas, y que el mismo se encuentre aún en etapa de instrucción, haciendo caso omiso de los indicadores y demás elementos probatorios habidos. A su vez, se requirió la intervención de Defensoría Nacional de Niños, niñas y adolescentes quien realizó dos presentaciones uno en el fuero civil y otro en el penal, intervenciones que hasta este momento no obtuvieron respuesta”.