Las ventas en los comercios minoristas registraron en mayo una caída de 3.4 por ciento interanual y de 8,9 por ciento respecto a abril, según un relevamiento de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). Pese al retroceso, las ventas acumulan un alza interanual de 5,4 por ciento en los primeros cinco meses del año. La medición se realizó en 895 comercios del país entre el 1 y el 3 de junio.

La entidad pyme, en un comunicado de prensa, señaló que en mayo “todos los rubros relevados vieron retroceder sus ventas, tanto en la comparación anual como mensual. El mercado de consumo notó el menor poder de compra del ingreso familiar y las menores propuestas de financiamiento”.

El rubro Indumentaria y textil encabezó la caída con un retroceso de 9 por ciento interanual y 13,8 por ciento mensual. “El mayor problema de este rubro fueron los saltos en los precios que no solo desalentaron el consumo, sino que activaron la venta informal por redes y grupos sociales, perjudicando al comercio formal”, aseguró CAME. Los faltantes de mercadería y las menores opciones de financiamiento también restaron ventas.

El segundo rubro con peor desempeño fue Bazar, decoración, textiles para el hogar y muebles con un retroceso de 3,3 por ciento anual y 8,4 por ciento mensual. En este caso, CAME informó que la situación más difícil la tuvieron los negocios orientados al rubro decoración, donde en mayo se vendió a cuentagotas y productos de bajo precio.

El podio de los rubros con peor desempeño lo completa Alimentos y Bebidas con un retroceso de 2,9 por ciento anual y 4,2 por ciento mensual. “Los comercios consultados señalaron que fue notorio cómo la gente se volcó a productos más económicos y a comprar solo lo necesario. Muchos locales vienen además recortando los stocks, reponen más lentamente, tienen problemas para conseguir variedad, y eso también le deja menos opciones para elegir al consumidor”, subrayó CAME.

Farmacias y perfumerías tuvieron una caída en las ventas de 1,8 por ciento anual y 13,6 por ciento mensual. CAME destacó que la peor situación fue para las perfumerías, que tuvieron muy poco movimiento en el mes, especialmente las que mantienen mayor oferta de artículos importados. “En las farmacias, el frío disparó la venta de antigripales, antibióticos, analgésicos y vitaminas, pero los faltantes de productos demoraron la de otros medicamentos para tratamiento más específicos”, agregó el informe. 

Por último, las ventas en Calzado y marroquinería retrocedieron 1,6 por ciento interanual y 7,9 por ciento con respecto a abril. "Este es los sectores donde más se sienten los faltantes de productos. A su vez, las subas de precios hacen difícil la reposición de mercadería, y las empresas optan por comprar lo que se vende rápido", concluyó CAME.