Por segunda semana consecutiva la Asociación de Maestros y Profesores (AMP) tomará medidas de fuerza contra el gobierno de Ricardo Quintela.
Esta semana el gremio paritario hará un paro de 72 horas que tendrá lugar los días martes, miércoles y jueves. La medida de fuerza se cumplirá sin asistencia a los lugares de trabajo y afectará el dictado de clases en los niveles inicial, primario y secundario.
La protesta se hace en reclamo de una actualización salarial por fuera del incremento del 52% que en marzo pasado el gremio acordó con el Gobierno provincial. En concreto, el gremio exige un aumento de 15.000 pesos por cargo, remunerativos y no bonificables y a pagar en forma retroactiva a mayo. El gremio justifica el pedido de actualizar el acuerdo salarial en la escalada inflacionaria que se produjo en los primeros cuatro meses del año, en particular durante marzo y abril.
AMP formalizó este reclamo a mediados de mayo pasado y hasta ahora no tuvo respuestas por parte del Ministerio de Educación.
Ahora, y tras dos semanas de espera, el gremio se cansó del silencio del Gobierno y tomó medidas de fuerza. La semana pasada, el sindicato realizó un paro de 48 horas y ahora redobló la apuesta y va por una huelga de 72 horas. Además, la asamblea de delegados escolares de AMP también dispuso ratificar el estado de alerta y asamblea permanente en los lugares de trabajo.
Días atrás, el ministro de Educación, Ariel Martínez fue consultado por el pedido de aumento salarial formulado por AMP y respondió que por el momento el Gobierno no tiene previsto aplicar una modificación al acuerdo salarial firmado en marzo. "Por ahora no hay una nueva oferta salarial a los docentes", había dicho el titular de la cartera educativa.
De todos modos, Martínez aclaró que el Gobierno receptó los reclamos gremiales y que se está avanzando con las simulaciones salariales. "Todo depende de los fondos nacionales. Nuestra pauta salarial la estamos cumpliendo, en marzo 2021 a marzo 2022 somos la provincia que más creció en el tema salarial", aseguró para luego agregar que el compromiso del Gobierno es que los salarios no queden por debajo de la inflación y que eso hasta ahora se está logrando.
El 52% de aumento firmado en marzo significa una mejora de 26.000 pesos y según lo acordado, se pagará en cinco tramos durante este año. Los incrementos se abonarán con los sueldos de marzo, abril, julio, septiembre y noviembre.
El incremento a los docentes se abonará de la siguiente manera: se pagaron 3.000 pesos al básico en marzo y otros 2.000 pesos -también al básico- en abril. En tanto en julio, el sector recibirá un aumento de 5.000 pesos que será remunerativo y no bonificable mientras que en septiembre se incorporarán al sueldo docente 4.000 pesos más remunerativos y no bonificables.
A su vez, en noviembre se aplicará la quinta mejora que consistirá en un pago de 2.000 pesos al básico (1.000 pesos de aumento genuino o "real" y otros 1.000 pesos de blanqueo).