"Si querían conocer la cara de la remarcación de precios, la tuvieron en AEA", dijo este martes el presidente, Alberto Fernández, en relación al poder de mercado del círculo rojo reunido en el mitin de la Asociación Empresaria Argentina (AEA). El mandatario se despachó contra los empresarios en el brindis por el Día del Periodista. Antes había participado del encuentro de AEA a través de un mensaje grabado en el cual se refirió a la necesidad de “distribuir la riqueza” y “desacoplar los precios internacionales de los internos”.
"La Anónima remarca precios todos los días", tiró el empresario supermercadista Federico Braun a modo de chiste frente a una pregunta en el panel del cual participó en el foro de AEA. La reacción de Braun tocó una fibra sensible, en un cuadro de aceleración inflacionaria que provoca deterioro social y trastorno macroeconómico.
"Yo les pido a los empresarios argentinos que comprendan la dimensión del problema que enfrenta la economía mundial, que está afectada por una guerra que pone en crisis la seguridad alimentaria del mundo. Lo que tenemos que hacer es trabajar con responsabilidad. No me parece responsable que se le pregunte a un empresario de esa magnitud y su respuesta sea 'remarcar precios'. Muchas veces les habló a los argentinos de la inflación autoconstruida. La inflación autoconstruida no es otra cosa que la remarcación de precios. Si querían conocer la cara de la remarcación de precios, la tuvieron en AEA", dijo Fernández frente a periodistas, acompañado por el jefe de Gabinete, Juan Manzur, y por la portavoz Gabriela Cerruti.
El mandatario siguió en Twitter: "es evidente que hay empresarios que no entienden su responsabilidad. Confiesan públicamente y entre risas lo que es un martirio para millones de argentinos y argentinas. Para que una mejor distribución del ingreso sea posible, es imperioso ponerle un ancla a la suba de los alimentos. Más compromiso. Menos risas banales".
Tensión y círculo rojo
El descargo de Fernández se encuadra no solo en el escenario inflacionario sino también, a nivel político, en la tensión interna frente a la vicepresidenta, Cristina Fernández. El kirchnerismo le reprocha a Fernández y al ministro de Economía, Martín Guzmán, que mientras se reúnen a solas con Luis Pagani, dueño de Arcor, y Paolo Rocca, líder de Techint, esas empresas se dan vuelta y mantienen su política de suba de precios y maximización de su poder de mercado.
Frente a Rocca y Pagani, y también ante Alfredo Coto, Héctor Magnetto (Grupo Clarín), Federico Braun (La Anónima), Martín Migoya (Globant) y Carlos Miguens (Grupo Miguens), entre otros empresarios del círculo rojo que participaron de la reunión de AEA, Fernández envío un mensaje grabado con un tono bastante más amable que el que horas más tarde expresó ante periodistas y en Twitter.
"Nuestro programa económico tiene tres pilares en los que se funda y hay dos con los que venimos cumpliendo. Venimos cumpliendo con el aumento de la producción y con el aumento del trabajo formal, pero nos está costando mucho terminar con la desigualdad. Porque la desigualdad fue dada por esos años en donde unos pocos ganaban y muchos perdían. Años donde la especulación financiera hizo millonarios a mucho, pero se llevó puesta 27 mil Pymes. Por lo tanto, debemos trabajar en eso en un contexto inflacionario que se potencia por una guerra que se ha desatado en el norte y no advierte el daño que está causando al sur", indicó Fernández.
Con respecto al impacto de la guerra en Ucrania sobre los precios de los alimentos, el Presidente dijo que "Argentina gana relativamente porque esos precios internacionales de los alimentos que crecen son precios que crecen internamente. No hemos logrado que nuestras productoras de alimentos se asocien al conjunto de los argentinos y desacoplen suficientemente los precios internacionales de los precios internos. Yo creo que es allí donde tenemos un verdadero desafío como sociedad porque todo lo que viene por delante es un conjunto de oportunidades en un mundo muy lastimado que está revisando el sentido mismo de la globalización".
Fernández "llamo a la reflexión a los empresarios" en relación a que "las oportunidades que se nos den no sean oportunidades para unos sino para todos y todas quienes habitan la tierra argentina". "Tenemos que aprender y reglamentar adecuadamente la distribución del ingreso. Esa es la tarea que nos está quedando pendiente frente a una gran oportunidad que la Argentina tiene por los 10 años que vienen", cerró.