Se cumplen 24 años de la masacre de la comunidad de El Charco, en el estado mexicano de Guerrero, donde esta semana viudas, sobrevivientes, hermanas, estudiantes y defensoras de la tierra encabezaron una nueva movilización para que la memoria de los líderes asesinados no quede impune y para clamar por justicia y castigo a los militares que ejecutaron esa matanza.

El 7 de junio de 1998, en la escuela primaria Caritino Maldonado Pérez, mientras dormían campesinos indígenas de diferentes comunidades, reunidos en un proceso de organización para visibilizar y denunciar cómo las autoridades sometían a la miseria a las comunidades na savi, soldados del ejército mexicano sitiaron el lugar y abrieron fuego en un ataque armado, en el que 11 campesinos fueron asesinados, 15 personas torturadas y otras 30 encerradas de manera arbitraria por más de quince días en cuarteles militares. Sobre las 11 ejecuciones extrajudiciales no se abrió ninguna averiguación previa o investigación, no existen datos de quién dispuso la masacre ni registros de los militares que participaron

Cada año, las mujeres y sobrevivientes en lucha marchan contra la impunidad por las calles de Ayutla de los Libres. Armaron esta semana un mitin en la Plaza de la Paz y exigieron a los gobiernos estatal y federal que los soldados y mandos militares responsables de los crímenes sean procesados y enjuiciados. “Justicia y castigo a los militares asesinos”, consigna Tlachinollan, el Centro de Derechos Humanos de la Montaña de Guerrero. Y las mujeres se pronunciaron: “A 24 años de la masacre de El Charco no ha habido justicia para las familias, lo que queremos es que se esclarezca lo que sucedió aquella madrugada del 7 de junio. Nosotras seguimos sin saber qué fue lo que pasó o quién ordenó esa masacre. Como viudas sufrimos muchas consecuencias psicológicas, muchas organizaciones se aprovecharon de nosotras y cobraron las supuestas indemnizaciones que otorgó el gobierno; nosotras no recibimos nada, no queremos nada, solo justicia. Y seguiremos en esta lucha hasta que se encuentre la justicia y se castigue a los militares asesinos”.