El Gobierno de Estados Unidos, a cargo del presidente Joe Biden, dejará de solicitar a los viajeros que presenten una prueba de coronavirus negativa antes de abordar vuelos hacia el país. La medida comenzará a regir desde el próximo domingo.

Según explicó un alto funcionario del Ejecutivo, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades determinaron que la prueba negativa “ya no es necesaria”, mientras que adelantó que la agencia de salud reevaluará el requisito cada 90 días, ya que podría restablecerse si surge una nueva variante preocupante, indicó AFP.

De esta forma, el único requisito para ingresar por vía aérea a Estados Unidos será que los no inmigrantes y no ciudadanos cuenten con el esquema de vacunación completo y muestren prueba de su vacunación antes de abordar un avión, a excepción de niños menores de 18 años, personas médicamente imposibilitadas de recibir la vacuna y viajeros de emergencia que no tienen acceso oportuno a una vacuna.

Los CDC han determinado que las vacunas aceptadas incluirán las fórmulas aprobadas o autorizadas por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) y las que figuran en la Lista de Uso de Emergencia (EUL) de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Eso incluye a Pfizer, Moderna, Johnson & Johnson, y también vacunas como AstraZeneca, Covishield, Sinovac y Sinopharm.