El gobierno municipal envió al Concejo el pliego para licitar el sistema de higiene urbana y gestión de los residuos de Rosario para los próximos 8 años más la posibilidad de un año de prórroga. El esquema actual de prestación no se modificará: la ciudad seguirá dividida en tres zonas. La zona sur (hoy a cargo de Lime Rosario SA) y zona norte (hoy a cargo de Limp Ar Rosario SA) son las que volverán a ser concesionadas a prestadores privados. Por otra parte la empresa estatal Sumar continuará prestando el servicio en su área asignada, que incluye centro, grandes avenidas, barrios Fonavi.

El pliego abarca la recolección de residuos domiciliarios, verdes y voluminosos, el barrido manual y mecánico y el desmalezado de cuadras con cordón cuneta, la limpieza de peatonales, centros comerciales, de la costanera norte y de espacios públicos en barrios Fonavi, la asistencia y erradicación de minibasurales crónicos y otros servicios complementarios.

Según el comunicado que difundió la Municipalidad, el nuevo sistema apunta fortalece y promueve la separación en origen con metas concretas de cumplimiento con el objetivo de lograr una fuerte reducción de los residuos urbanos. Este seguramente será uno de los puntos más discutidos a la hora del debate por parte de los concejales, ya que el gobierno de la ciudad apuesta a multiplicar la cantidad de contenedores para reciclables (anaranjados) y anunció que sumará otros de forma progresiva de color marrón para residuos orgánicos, sin precisiones sobre otros sistemas de recolección de reciclables que se realizan en la ciudad de forma experimental, ya sea con recolectores que pasan casa por casa o la recolección domiciliaria una vez por semana.

En los pliegos se proyecta que para 2025, el 45% de la población de la ciudad contará con servicios para separar residuos reciclables y el 15% para hacer lo propio con residuos orgánicos. En 2030, el 30% de la población (unos 280.000 vecinos y vecinas) dispondrá de servicios para separar orgánicos y el 60% (unos 600.000 vecinos y vecinas) reciclables, duplicando la cantidad actual.

La municipalidad promete profundizar la fiscalización y el control del servicio, incorporando en el 100% de los contenedores, sensores que permitirán ver en tiempo real las operaciones. A su vez, el pliego contempla un esquema de sanciones ante posibles incumplimientos, ya sea detectados por inspectores o vía reclamos ciudadanos. Se harán encuestas regularmente para relevar el funcionamiento de las empresas.

El pliego viene atado "a una inversión en infraestructura, equipamiento y tecnología superior a los 5 mil millones de pesos", que según la Municipalidad permitirá la renovación "de la totalidad del equipamiento en vía pública de las zonas licitadas, mejorando la calidad de camiones y contenedores; se incorporará nuevo equipamiento para mejorar la higiene de contenedores para separación en vía pública y de espacios públicos; más la tecnología que permita verificar y fiscalizar la prestación de servicios en tiempo real, esto es, la asistencia y limpieza de los 9.000 contenedores que existen en la ciudad hoy".

También se promete un programa para eliminar progresivamente minibasurales y transformarlos en espacios públicos de calidad.

La renovación del sistema tiene un capítulo dedicado a la paridad de género, según las exigencias de la ordenanza Nº10.290 sancionada en 2021.

En tanto, la empresa estatal de Servicio Urbano de Mantenimiento Ambiental Rosario (Sumar), encargada de prestar el servicio de higiene urbana en el 35% de la ciudad, renovó parte de su equipamiento con la adquisición de 8 camiones recolectores de carga lateral y una inversión de más de 400 millones de pesos.