Con la implementación del programa de prevención para las adicciones, Motivados por la Vida, la capital de Catamaca se convirtió en la primera ciudad argentina donde se aplica este método que ya se implementa en 34 países.

El Juez de Responsabilidad Penal Juvenil de Catamarca, Rodrigo Morabito, viene participando del proceso de implementación, y en diálogo con Catamarca/12, destacó el abordaje interinstitucional que propone la iniciativa de la municipalidad capitalina, así como la importancia de trabajar las adicciones como un problema de salud mental y no como una cuestión delictiva.

El programa Motivados por la Vida introduce un nuevo paradigma en el abordaje de las adicciones en Catamarca, ¿cuáles son lo más relevante?

Sí, la Municipalidad a través del intendente Gustavo Saadi y su equipo han introducido sin dudas un nuevo paradigma, que es nada más y nada menos que el trabajo que se va a realizar a largo plazo con toda la comunidad. Motivados por la Vida es un trabajo que se viene realizando en muchos países del mundo y que viene dando respuesta a lo que es la baja de chicos que consumen. Que es el paradigma de la prevención. En un Estado democrático y de derecho, la prevención es fundamental.

Rodrigo Morabito, primero a la izquierda.

El programa busca un abordaje interinstitucional, ¿cree que las instituciones están preparadas para sostener esta integración?

Creo que las instituciones siempre estuvieron preparadas, lo que pasa es que no solo hay que preocuparse, sino ocuparse del problema. No podemos negar que el consumo es parte de la sociedad. Es algo que ocurre cotidianamente. En este momento yo estoy respondiendo esta entrevista y hay chicos que están consumiendo. Y no solo consumen los pibes y las pibas, consumen los adultos, pero en la prevención lo que nos preocupa son los niños, niñas y adolescentes.

Sin dudas que las instituciones deben estar a la altura de las circunstancias y comenzar a trabajar en territorio. Una vez que tengamos la base científica de los datos que nos van a proporcionar la encuesta que se va a realizar, el abordaje tiene que ser interinstitucional, tiene que trascender las instituciones y llegar a la comunidad. Debe ser comunitario e interdisciplinario.

Y la Municipalidad de San Fernando del Valle de Catamarca, que es además la primera municipalidad del país en introducir el programa Planet Youth, se encuentra preparada.

¿Qué papel cree que debe jugar la Justicia en el problema de las adicciones?

Creo que la Justicia juega un rol muy limitado, porque si bien es cierto que podría decirte que la gran mayoría de los chicos que cometen delito, todo tipo, ya sea delito contra la propiedad, contra la integridad sexual, contra la vida, están bajo los efectos de alguna sustancia, generalmente en la provincia de Catamarca se trata de sustancias ansiolíticas, es decir drogas legales pero con receta: alplax, rivotril, clonazepam. Y se da la particularidad que cuando consumen este tipo de ansiolíticos los delitos suelen ser más graves.

Pero también consumen marihuana, pegamento. Y tal como arrojaron los números de la segunda encuesta de Motivados por la Vida, en la capital, el alcohol está por encima de la media. En este sentido es fundamental abordar el control con la ley y abordar el problema del consumo y de la adicción como una cuestión de salud mental y no como una cuestión punitiva o delictual.

Parece haber una mirada punitiva acerca de las adicciones, ¿qué piensa al respecto?

Acerca de las adicciones hubo durante muchos años una mirada punitiva, una persona hoy en día adulta que está consumiendo un porro en una plaza, es una vereda, puede hacerlo tranquilamente porque forma parte del principio de reserva que está amparado por la Constitución Nacional. Eso es que todas las acciones privadas están reservadas a Dios, exenta de la autoridad de los magistrados. Todo lo que no está prohibido está permitido.

Ahora, fumarse un porro o cigarrillo de marihuana, siempre y cuando fuera hecho por una persona adulta la verdad que no afectaría. Y si lo hiciera una persona menor de edad y no traspasara el ámbito de su privacidad también no debería tener ninguna consecuencia punitiva. Sin embargo, hemos visto que como a diario se suele informar el tema de las drogas y del consumo de estupefacientes como una situación prácticamente muy vinculada con lo delictual, se asocia a que esto pueda llegar a tener un resultado punitivo. A ver, lo que se sanciona es el delito en la Justicia penal, pero no se sanciona la situación de haber consumido. Porque además, porque además hay un mito y una gran confusión, los pibes y las pibas no roban porque están drogados, sino que roban para drogarse, que son dos cuestiones diferentes.

Esto afortunadamente ha ido avanzando, a partir del Fallo Arriola, y Bazterrica en su momento también. Aunque, fíjate que en Córdoba un chico de 16, 17 años fue internado en un centro carcelario por problemas de consumo. Entonces sigue habiendo una mirada por allí punitiva, pero es menor a medida que va pasando el tiempo.

¿Hay estadísticas sobre casos de adicción judicializados en la provincia?

No hay estadísticas sobre caso de adicción judicializado en la provincia. Lo que sí te puedo decir es que de la cantidad de juicios que he intervenido, sobre todo contra la propiedad, la mayoría de los perfiles de los pibes son los mismos, jóvenes, cada vez la franja etaria es más abajo, o sea que cada vez son más jóvenes, de los sectores postergados, de los sectores más vulnerables y son situaciones complejas.

Hay muchos pibes con problemas de consumo que han cometido un delito y obviamente están judicializados, pero por el delito y no por el consuno, que son dos cuestiones diferentes. Pero en la Justicia penal muchas veces la situación no se aborda con la profundidad que debería realizarse. Me parece que cuando una persona es un consumidor crónico y viene cometiendo muchos delitos, allí habría que empezar a evaluarlo independientemente del delito por protección de la salud mental.

Desde su experiencia en la Justicia Penal, ¿cómo debe encararse el problema?

Hace muchos años que trabajo en la Justicia Penal Juvenil, he visto muchos casos tristes y lamentables de chicos que consumen, que son adictos, chicos que han perdido la vida, chicos que han terminado en un servicio penitenciario para adultos y la verdad que eso no nos coloca como un Estado que esté mirando con profundidad el problema de salud de estos chicos. Creo que es fundamental empezar a trabajar sobre las causas que provocan las adicciones y no sobre los efectos, es decir, cuando ya tenemos una persona vulnerada en todos sus derechos fundamentales.

Esta es la importancia de que el Municipio de la capital ha tomado el guante y está trabajando para que el consumo se reduzca y haya una mejor salud y los niños, niñas y adolescentes puedan disfrutar del máximo de salud posible.