La escasez de gasoil puso a los biocombustibles en el centro de la escena nuevamente. Un lobby santafesino que hace dos años perdió frente a los intereses de las provincias petroleras. Una sola decisión de la secretaría de Energía de la Nación podría alterar esa ecuación y devolverle a Santa Fe (que produce el 80% de todo el biodiesel del país) la centralidad que está buscando y la respuesta que está ofreciendo. Importar gasoil demanda muchos dólares, no se pagan impuestos y no se generan puestos de trabajo. En el gobierno de Omar Perotti se entusiasman con un anuncio inminente del propio presidente Alberto Fernández a su regreso de Estados Unidos. "Lo que estamos proponiendo en sustituir importaciones por industria nacional", dijo a Rosario/12 el diputado nacional Roberto Mirabella. La discusión fina de la suba del corte de biodiesel enfrenta otro lobby poderoso: Las petroleras quieren sumar a las grandes aceiteras como proveedoras, lo cual perjudicaría a las pymes del sector. Por eso le proponen al gobierno que eleve el corte al 10% en lugar del 15% pero que el negocio sea sólo para las pequeñas empresas. Un problema más: Las grandes son las que proveen a las chicas el aceite de soja para elaborar el biocombustibles. Como se ve, intereses es lo que sobra. 

El diputado Mirabella incorporó un pedido más para generar excendente de gasoil nacional. Pide que las máquinas con motores Wartsila que generan energía en varios sectores de la provincia "puedan funcionar en un 90 o 100 por ciento con biodiesel, como lo hacen estos mismos motores en Europa", explicó el legislador del Frente de Todos.

Hoy, cuando se carga gasoil, una parte es biodiesel, ya hay un 4% en la mezcla por eso el pedido es que se eleve. Y además "le estamos pidiendo a Cammesa y a la Secretaría de Energía, que muchos motores que producen energía eléctrica en Santa Fe funcionen con biodiesel y que ese gasoil sobrante vaya al consumo de la industria automotriz. Hay motores Wartsila (por el nombre del fabricante) que tenemos 18 en Santa Fe -en Pérez, en Granadero Baigorria y en Villa Ocampo- que son de alto nivel de tecnología que podrían funcionar 100% con biodiesel", afirmó el diputado.

Eso significaría un aumento notable de la producción de biodiesel en Santa Fe. Argentina invirtió en 2021 casi 2000 millones de dólares en importar gasoil, la mitad para la industria automotriz y otra parte para la producción de energía eléctrica. Para Mirabella implica que "estamos ante una posibilidad muy importante para sustituir importaciones".

Las doce empresas que están en Santa Fe y venden biodiesel a las petroleras, están en un 50 o 60% de capacidad ociosa. "Aumentar la producción de biodiesel genera empleo, paga impuestos, se cobra en pesos. Es decir, estamos proponiendo sustituir importaciones por industria nacional", insistió Mirabella. Y agregó que "lo venimos diciendo desde hace dos años, cuando discutimos el nuevo marco regulatorio del biocombustible. El biodiesel en Argentina se produce a partir del aceite de soja y Santa Fe es la provincia que tiene la mayor capacidad de producción: El 80% se puede producir aquí, con lo cual hoy tenemos una gran cantidad de empresas que tienen capacidad ociosa".

La Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (FADEEAC) expresó la "profunda angustia, preocupación y frustración que genera en el sector la falta de acceso a los combustibles, así como la discrecionalidad que se verifica en los precios, cuando se accede al mismo". La entidad dijo que son 8 las provincias que están sufriendo el desabastecimiento de gasoil, y que los transportistas están llegando a pagar hasta 250 pesos por un litro de combustible.

En este marco, CARBIO y CIARA dicen que el país cuenta con suficiente materia prima y capacidad instalada para sustituir la importación de más de un millón de toneladas de gasoil con un biocombustible limpio y de fabricación nacional, contribuyendo además a la salud pública y el medio ambiente.

Las entidades proponen que la Secretaría de Energía emita una nueva Resolución que autorice a las petroleras el uso de hasta un 15% de biodiesel. La propuesta mantiene el 5% regulado para la pymes a las que las mezcladoras están obligadas a comprar bajo precios fijados por la cartera de energía, mientras que el 10% restante quedaría sujeto a las libres reglas de oferta y demanda del mercado. El comunicado explica que de esta forma se asegura el abastecimiento en las mejoras condiciones posibles de calidad y precio para el consumidor.