El reconocido poeta Fernando Noy presentará este martes, junto al pianista Martín Pavlovsky, un nuevo espectáculo: Poesía en concierto. El eventó será a partir de las 20:30 en el Bebop Club (Uriarte 1658). Allí, el performer leerá a cinco autoras que marcaron su vida, mientras que el músico presentará su último disco, titulado Dos mundos.
En diálogo con AM750, Noy repasó el origen de su nueva obra: "Yo creo que los grandes poetas siempre quedan abiertos. Para que quienes los lean tengan la sensación de llegar a algún lugar. Yo sigo esa trayectoria de mi vida, y esta vez reuní a cinco poetas”.
El artista comentó que este recorrido comenzó con Alejandra Pizarnik. “Después la propia Alejandra me presentó a Olga Orozco. Y Orozco llegó una noche a la casa de Alejandra y le leía a los poetas que tenía en la biblioteca”, relató en La casa invita.
Y continuó: “Después surge Amelia Biagioni, de la que se sabe poco, pero es tan grande como ambas. Es menos popular, Pizarnik que ya es un Rolling Stone. Las tres son de la misma intensidad”.
Finalmente, dijo: “En mis giros, en mis paseos de vagabundaje, conocí a Marosa Di Giorgio en persona, en Montevideo. Logramos traerla a Buenos Aires. Después, cuando fui a Brasil, no tuve otra que traducir a Adélia Prado”.
Estas son las cinco autoras que marcaron la vida de Noy y a las que les pondrá su voz durante el espectáculo.
“La poesía transgénica”
Por otro lado, Noy se refirió al proceso de escritura y a lo que él define, de forma irónica, como "poesía transgénica”. “La inspiración es algo imposible. Si la usufructuás no es tal. Es un estado, un éxtasis, que llega ante tanta tragedia. Ojalá se vendieran kilos de inspiración. Pero no tiene precio”, dijo.
“Por eso creo que hay tanto interés por oír poetas. Porque quizás sea la salvación de un mundo que vamos a inventar. Cuando leo un poema que me colma, me calma, estoy en paz”, agregó.
Y concluyó: “Hay muchos poetas que creen que lo son, hay mucha poesía transgénica, ortopédica. Que tampoco es eso. Como un mal antifaz, una máscara. Facebook es terrible para mí, es un laberinto interminable”.