Un grupo de docentes autoconvocados de los niveles secundario y superior que trabajan en zonas de frontera y desfavorables buscan una equiparación en el régimen jubilatorio para que les computen los años de trabajo de la misma manera que a los maestros de nivel inicial y primario que se desempeñan en los mismos territorios a quienes se les computan tres años de aportes jubilatorios por cada año de trabajo, teniendo en cuenta las condiciones geográficas y socioeconómicas donde llevan adelante su profesión. 

Los autoconvocados piden acceder al mismo beneficio que está establecido en el país desde 1975, cuando se aprobó el decreto nacional 538. El grupo ya logró el año pasado la aprobación de un proyecto de declaración de la Cámara de Diputados provincial. Y actualmente pretenden que la iniciativa se establezca en todo el país, y para ello, mantuvieron un encuentro con el legislador nacional Lucas Godoy (Igualar), quien asumió el compromiso de presentar un proyecto de ley.  

Una de las docentes impulsoras es Patricia Aguilar, quien ejerce su profesión desde hace 28 años en Rivadavia Banda Norte, en el Chaco salteño. En diálogo con Salta/12, la docente contó que el pedido se impulsa desde diversas localidaes de la provincia, como Santa Victoria Este (en el departamento Rivadavia), Iruya e Islas de Cañas (departamento Iruya), San Antonio de los Cobres (Los Andes), donde hay colegios secundarios e instituciones terciarias que se encuentran en zonas difíciles. 

Dentro del esquema salarial docente están los ítems señalados como zonas desfavorables, zonas muy desfavorables, y zonas de frontera. En el caso de los maestros y maestras de nivel inicial y primario no sólo reciben una paga diferenciada, sino que los años trabajados son computados de manera distinta para los aportes jubilatorios.

El ejercicio de la docencia en estos lugares requiere de un traslado de varios kilómetros, donde deben afrontar problemas de acceso por la falta de caminos o el mal estado, ya que las instituciones educativas se encuentran fuera de los centros urbanos. A ello, se suman las condiciones socioeconómicas, Aguilar sostuvo que hay deficiencia en la infraestructura escolar y carencia de servicios esenciales, tanto para los docentes como para las familias del lugar. 

Un ejemplo, es la falta de acceso a una adecuada atención sanitaria. "Eso también va en desmedro de quienes trabajamos ahí", expresó la docente; dijo que si tienen alguna afección en la zona, no pueden ser atendidos por falta de profesionales de la salud. Agregó que no hay agua potable en la gran mayoría de las instituciones, y que cuentan con agua que extraen de pozos que "tienen arsénico o mucho cloro". "No es agua apta para el consumo seguro", precisó. 

Todo ese contexto llevó a que se autoconvoquen, y que resalten la diferencia que hace la norma nacional entre los docentes del nivel secundario y superior con los de nivel inicial y primario, a pesar de ejercen la profesión en las mismas condiciones, dijo Aguilar. 

Incluso señaló que quienes "peor se la llevan" son los docentes secundarios que trabajan en los colegios itinerantes, ya que deben trasladarse semanalmente por distintos parajes. Esto implica recorrer varios lugares donde, en muchos de los casos, no cuenten con albergues para pasar el día o la noche. 

En ese sentido, Aguilar cuestionó que desde hace décadas se mantiene esta inequidad entre los maestros que forman parte del sistema obligatorio de educación. "Sufrimos el mismo padecimiento que los maestros de nivel inicial y primario", subrayó, y entendió que el planteo que hacen es hasta "irrisorio", si se tiene en cuenta que no acceden a un beneficio que está totalmente justificado. 

Dijo que frente a esto y ante el hecho de que ningún gremio docente hizo suyo su pedido, emprendieron las solicitudes a los legisladores provinciales y nacionales. Así fue que el 4 de mayo del año pasado lograron que se aprobara un proyecto de declaración provincial, impulsado por el ex diputado Ramón "Rana" Villa, solicitando al Ejecutivo Nacional que se garantice "la extensión del derecho al Régimen Jubilatorio de zonas y áreas inhóspitas y de fronteras establecido en el decreto N° 538/75 a los docentes que se desempeñan en los nivels secundario y superior". 

Al tratarse de una norma nacional, el pedido de modificación también tuvo que trasladarse a los legisladores nacionales. Así fue que el lunes último, fueron junto a Villa a un encuentro con el diputado Lucas Godoy, a quien le entregaron un petitorio solicitando que se encamine un proyecto de ley sobre el tema. Además, "le presentamos las firmas de los distintos lugares para hacerle saber las cosas que padecemos", dijo Aguilar. 

"La gran mayoría hacemos carrera docente en esas zonas y solicitamos ser incorporados a los beneficios", expresó la docente que se desempeña en tres colegios secundarios de la zona de Coronel Juan Solá, más conocida como Morillo. E insistió en que están en igualdad de condiciones con el resto de maestros de nivel inicial y primario, por lo que, "recurrimos al canal de la democracia para que ese derecho sea reconocido". 

Contó que Godoy asumió el compromiso, por lo que, la profesora también anheló que lo mismo ocurra con el resto de legisladores salteños. Aseguró que de aprobarse el proyecto podría "representar un antecedente a nivel nacional, que beneficie a otras provincias". 

La docente también destacó que las instituciones públicas que están en esas zonas "siguen adelante con firmeza y con mucha convicción gracias a la comunidad educativa que la rodea", no sólo de las mismas autoridades educativas y sus docentes, sino de las familias de los estudiantes. 

En ese sentido, pidió que las gestiones provinciales de Educación garanticen un igual acceso al derecho de la educación a los alumnos de las zonas desfavorables y de frontera, además de los servicios que se desprenden de ello, como el beneficio de una alimentación saludable y las mismas comodidades de infraestructura que tienen los estudiantes de las ciudades. "Mis chicos tienen los mismos derechos que los chicos que están en ámbitos urbanos", destacó. 

Un pedido justo y legítimo

El diputado nacional Godoy aseguró que el pedido de estos docentes es "legítimo" y "justo". "Lograr que sean incluidos en la normativa vigente es un acto de justicia", por "el enorme esfuerzo que hacen brindando una educación de calidad a nuestros jóvenes en zonas muchas veces intransitables, de difícil acceso o muy alejadas, con servicios e infraestructuras vulnerables", añadió. 

En ese sentido, dijo que es preciso analizar esta situación de desigualdad que se presenta desde hace décadas en el país. Indicó que si bien la norma, en un primer momento no contemplaba a estos niveles educativos porque en dichas zonas aún no se garantizaba este acceso, con el paso de los años la situación fue cambiando. Y destacó que se trata de una "lucha que vienen sosteniendo de hace tiempo, y es totalmente razonable y legítima"

Indicó que en términos objetivos todos los docentes que están en esas zonas cumplen las mismas funciones, por lo que, los establecidos en el régimen jubilatorio de los docentes de primario "también debieran ser aplicados en el nivel secundario y superior". Por tal razón, el diputado aseguró que en los próximos días empezarán a trabajar en el proyecto de ley que se presentará en el Congreso de la Nación. 

Por su parte, el ex diputado Villa expresó a Salta/12 que no hay punto de discordia con el pedido de los docentes porque "tienen razón", lo que lo llevó a seguir acompañando el pedido de los maestros, a pesar de que ya no es legislador local. 

Sostuvo que el derecho establecido en el decreto nacional es "realmente loable" y "viene a hacer un poco de justicia porque no es lo mismo enseñar en las grandes ciudades y pueblos donde hay comodidades". En ese sentido, contó que algunos de los docentes con los que suele tratar, ya que vive en el Chaco salteño, "ni siquiera tienen dónde pasar la noche" cuando se trasladan de paraje a paraje. "El reclamo es justo", insistió, en concordancia con Godoy.