Al menos 59 personas murieron este fin de semana en India y Bangladés, debido a las fuertes lluvias monzónicas registradas en la zona, mientras que millones de habitantes de distintos pueblos y ciudades se encuentran aislados. Se cree que en la situación climática se complicará durante los próximos días. 

Desde el viernes, los rayos caídos durante el temporal mataron al menos a 21 personas en Bangladés, informó el jefe de la policía local, Mizanur Rahman. Entre ellos figuran tres niñes de entre 12 y 14 años que fallecieron en la ciudad de Nandail.

También se registraron en el país 4 muertes por deslizamientos de tierra provocados por las tormentas en la ciudad portuaria de Chittagong.

Aunque en Bangladés las inundaciones son un fenómeno que se produce con regularidad, debido a que es una zona de baja altitud, los expertos afirman que el cambio climático está aumentando su frecuencia, su gravedad y su carácter repentino.

En la vecina India, al menos 16 personas fallecieron el jueves en el estado de Meghalaya (noreste) tras corrimientos de tierra y riadas que anegaron carreteras, informó en Twitter Conrad Sangma, primer ministro de este estado.

En el estado de Assam, fueron 18 las personas que murieron por deslizamientos de tierra.

Rescates

En Assam, India, el número de afectados por inundaciones superaba este sábado los 2,6 millones de personas. "Les hemos pedido a los responsables del distrito suministrar toda la ayuda y los equipos de rescate necesarios" para las personas afectadas por las lluvias torrenciales", dijo a la prensa el primer ministro del estado, Himanta Biswa Sarma. 

En Bangladés, en tanto, gran parte del noreste está bajo el agua y se han desplegado tropas para evacuar a las personas aisladas hacia escuelas de la zona, que se transformaron en refugios de emergencia. 

"El viernes por la mañana toda la aldea estaba bajo el agua y todos estábamos aislados", dijo Lokman, cuya familia vive en Companyganj, Bangladés.

"Tras esperar todo el día en el tejado de nuestra casa, un vecino nos rescató con una barca improvisada. Mi madre dijo que nunca había visto una inundación así en su vida", añadió este joven de 23 años.

Asma Akter, otra mujer rescatada de las inundaciones, explicó que su familia no había comido desde hacía dos días. "El agua subió tan rápido que no pudimos llevarnos ninguna de nuestras pertenencias", lamentó.

"La situación es mala"

Por las inundaciones, este viernes se cerró el tercer aeropuerto internacional de Bangladés, situado en Sylhet, en el noreste. 

La situación en la región se agravó el sábado por la mañana, tras un aumento de las precipitaciones el viernes por la tarde, declaró a la AFP Mosharraf Hossain, administrador jefe del gobierno de la región de Sylhet.

"La situación es mala. Más de cuatro millones de personas están bloqueadas por las inundaciones", reconoció el funcionario de Sylhet, región que está sin electricidad.

Según las previsiones meteorológicas, las inundaciones se agravarán en los próximos dos días en Bangladés y el noreste de India debido a las fuertes lluvias.