El líder de la coalición de izquierdas en las legislativas francesas, Jean-Luc Mélenchon, aseguró este domingo que "todas las posibilidades" están sobre la mesa y que no tiene previsto renunciar a la ambición de dirigir el Gobierno.
Tras el cierre de los comicios, Mélenchon se presentó frente a sus seguidores con un discurso en tono triunfalista, pese a que los primeros sondeos lo alejan de la mayoría parlamentaria y de poder formar el Gobierno que él mismo pensaba encabezar como nuevo primer ministro.
Pese a ello, Mélenchon, aseguró: "No renunciamos a la ambición de ser quienes dirijamos el Gobierno. No duden de nosotros, no se dejen llevar por la impaciencia".
En tono combativo, el líder de la alianza Nupes (Nueva Unión Popular Ecológica y Social) destacó la "derrota" del partido del actual presidente, Emmanuel Macron, quien quedó lejos de renovar la mayoría absoluta, algo que nunca antes había sucedido en las legislativas posteriores a las presidenciales.
Mélenchon aseveró que ese era su principal objetivo, pese a que durante toda la campaña se mostró convencido de obtener una mayoría que le permitiera dirigir el Ejecutivo.
En relación con el actual presidente de la república, el izquierdista indicó que "el 'macronismo' no solo se ha quebrado, además ha sumergido al país en un callejón sin salida", y le reprochó que, pese a presentarse como una barrera contra la extrema derecha, "la ha reforzado más que nunca en la historia".
Al analizar el desempeño de Nupes, el líder izquierdista, que logró reunir bajo las mismas siglas a su partido, La Francia Insumisa, junto a socialistas, comunistas y ecologistas, se felicitó por haber multiplicado por tres el número de diputados que obtuvieron por separado en 2017.
Para Mélenchon, ese número de diputados, que rondaría los 150, constituye "una herramienta de combate" que permitirá defender sus ideas y, aunque él no estará en la nueva Asamblea Nacional, aseguró que seguirá "hasta el último aliento al frente de las tropas".