Un programador de 41 años fue asesinado este domingo en la localidad bonaerense de Boulogne, cuando un ladrón que había entrado a robar a su casa lo ahorcó con un cable y lo arrojó atado a la pileta.
Según informaron fuentes judiciales, el presunto autor del crimen fue detenido dentro de la vivienda y será indagado este lunes, mientras se esperan los resultados de la autopsia.
El hecho ocurrió este domingo a las 11.50 en una vivienda ubicada en la calle Aguado 1251 de Boulogne, partido de San Isidro, en el norte del conurbano, cuando la pareja del programador Federico Sáenz, una médica llamada María Laura Martínez (44), lavaba el auto en el patio delantero del inmueble y un ladrón saltó la reja y la abordó para robarle.
Luego de agredir y amenazar a la mujer, el asaltante logró quitarle las llaves de la casa. Tras entrar a la propiedad, cerró la puerta con llave, dejando a la médica del lado de afuera, quien salió corriendo y le pidió al empleado de la garita de seguridad de la cuadra que llamara a la policía.
Según fuentes judiciales y policiales, cuando la médica regresó al frente de su casa pudo observar por las ventanas que el ladrón había dejado al programador atado en el jardín trasero. Al escucharlo pedir auxilio, de acuerdo con el testimonio de la mujer, el asaltante apareció junto al hombre y le pegó una trompada en la cara.
Minutos después, llegaron móviles de la comisaría 3ra. de Boulogne y de la Patrulla Municipal de San Isidro, quienes guiados por la médica lograron ingresar a la vivienda por una puerta trasera. Allí se encontraron con el sospechoso en la cocina, quien tenía una cuchilla de la casa en la cintura.
El hombre fue reducido y detenido por un grupo de efectivos, mientras que otros uniformados realizaban un recorrido por todos los ambientes de la casa, sin lograr dar con el paradero de Sáenz. Finalmente, la víctima fue hallada en el fondo de la pileta que la familia tiene en el jardín trasero.
La hipótesis
La principal hipótesis de los investigadores es que en algún momento del asalto Sáenz luchó con el asaltante y éste lo estranguló con un cable y lo tiró a la pileta, donde terminó de morir ahogado. “Lo sacaron del agua y tenía dos vueltas de un cable HDMI rodeándole el cuello. De inmediato le hicieron maniobras de RCP, pero no lo pudieron reanimar. Todo indica que estuvo varios minutos en el agua”, indicó a Télam un investigador judicial.
Un sobrino de Sáenz llamado Facundo aseguró que su tío era “la persona más buena que podías conocer, alguien a quien era imposible desearle el mal” y que probablemente “actuó en defensa de las sobrinas, que estaban en la casa”, porque “ellos habían acordado que si pasaban una situación así no se resistiría a un robo”.
En la casa, según informaron fuentes cercanas al caso, estaban presentes dos sobrinas de la pareja, de 8 y 11 años, a quienes el ladrón también amenazó. De acuerdo con el relato de las propias niñas, el asaltante les habría dicho que se quedaran encerradas en su cuarto porque quería "robar una bicicleta".
El caso es investigado por la fiscal María Paula Hertrig, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) de Boulogne, quien se hizo presente en la escena del crimen para dar las primeras directivas de la investigación, entrevistar a algunos testigos y supervisar la labor de los peritos.
El cuerpo de Sáenz fue trasladado a la morgue que funciona en el Hospital de San Fernando, para que se le realice una autopsia. “Lo que concluyan los forenses será clave para saber si el hombre fue estrangulado con el cable y arrojado muerto a la pileta, o si en realidad se terminó ahogando bajo el agua”, señaló una de las fuentes del caso.
Indagatoria
El sospechoso detenido fue identificado como Mauricio Nahuel Fernández (30), quien dijo vivir en un asentamiento cercano, en la vecina localidad de Béccar.
Este lunes, Fernández será indagado de manera presencial en la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) descentralizada de Boulogne, ubicada en la avenida Avelino Rolón 1030 de esa localidad del partido de San Isidro, por la fiscal María Paula Hertrig.
Según fuentes judiciales consultadas por Télam, Hertrig le imputará a Fernández los delitos de “tentativa de robo y homicidio agravado criminis causa”, es decir, matar para ocultar otro delito y lograr la impunidad, que prevé como única pena la prisión perpetua.
Respecto a la participación de terceros, Hertrig ya tiene acreditado a partir de una serie de videos de cámaras de seguridad de la zona que Fernández actuó solo. “Se lo ve cruzar la Panamericana y acercarse solo a la casa. Llegó solo caminando, no estaba acompañado por cómplices y tampoco lo esperaba algún vehículo de apoyo”, reveló uno de los investigadores.
En cuanto a los antecedentes del imputado, la Policía le remitió a la fiscal un primer informe en donde aparece relacionado con al menos tres causas en el departamento judicial San Isidro por delitos contra la propiedad: una por robo calificado de 2011, otra por una moto con pedido de secuestro de 2016 y la última por encubrimiento agravado de 2018.