La Justicia de San Isidro elevó este miércoles a juicio oral la causa por la muerte de Diego Maradona. Hay ocho profesionales de la salud imputados por el delito de “homicidio simple con dolo eventual”.
En la resolución, el juez de Garantías Orlando Díaz dispuso que la causa sea remitida a sorteo para que un Tribunal Oral de San Isidro juzgue por la muerte de “El Diez” al neurocirujano Leopoldo Luciano Luque; la psiquiatra Agustina Cosachov; el psicólogo Carlos Ángel "Charly" Díaz; la médica coordinadora de la prepaga Swiss Medical, Nancy Edith Forlini; el coordinador de enfermeros Mariano Ariel Perroni; el médico clínico Pedro Pablo Di Spagna; y a los enfermeros Ricardo Omar Almirón y Dahiana Gisela Madrid.
Todos están acusados del delito de “homicidio simple con dolo eventual”, que prevé una pena de entre 8 y 25 años. La solicitud firmada este miércoles por Díaz, fue presentada el 13 de abril por los fiscales Laura Capra, Patricio Ferrari y Cosme Iribarren, quienes decidieron concluir la etapa de instrucción y realizar formalmente la petición, en la que plantearon la existencia de un “cúmulo de conductas penalmente relevantes que condujeron a Diego Maradona a su triste fallecimiento”.
Agregaron que, si bien la prueba conducía inicialmente a mostrar la responsabilidad de Luque y Casachov, la investigación permitió detectar la responsabilidad de Díaz como integrante del cuerpo médico, de los responsables de las empresas de coordinación, de los enfermeros y del médico clínico designado para su internación domiciliaria.
“Nos encontramos hoy a poco más de un año de su muerte con certezas, y en condiciones de afirmar, que las personas que hoy, en este requerimiento se mencionan, han tenido responsabilidad penal en el fallecimiento de Diego Armando Maradona”, añade el documento.
Uno por uno, de qué se acusa a cada imputado
Leopoldo Luque. El neurocirujano es el principal imputado de la causa por ser el médico de cabecera de Maradona. Firmó la externación de la Clínica Olivos para llevarlo a la internación domiciliaria. "No garantizó su debido seguimiento con controles y estudios cardiológicos, ni convocó especialistas en materia cardiovascular, hepática y renal, conforme su cuadro requería, librando su destino a su suerte. En forma sistemática, ignoró y menospreció los síntomas y signos compatibles con la insuficiencia cardíaca que le eran informados por personas ajenas al equipo médico y que personalmente tuvo la oportunidad de evaluar", estipularon los fiscales en su resolución.
Agustina Cosachov. La especialista cumplía el rol de psiquiatra de Maradona y sospechan que era la encargada de prescribir la medicación psiquiátrica que tomaba el por entonces DT de Gimnasia. También quien firmó la externación de la Clínica Olivos. Los fiscales consideran que no aseguró "la correcta administración de la medicación y psicotrópicos, desentendiendose de los efectos adversos y eludiendo los controles y/o estudios apropiados a los fines de su evolución".
Carlos Ángel "Charly" Díaz. Psicólogo de Maradona. El hombre de 30 años ingresó al staff médico de la mano del abogado y representante del "10", Matías Morla. Es considerado como uno de los integrantes del "equipo médico tratante": lo acusan de "manipular" a la familia "proponiéndoles que todo lo que estaba sucediendo era producto de la libre y espontánea decisión de Maradona, alegando para ello que 'necesitaba espacio'".
Nancy Edith Forlini. Médica a cargo de la Gerencia de Cuidados Domiciliarios de la empresa Swiss Medical y coordinadora para la prepaga de la internación domiciliaria de Maradona. Consideran que omitió cumplir con deberes mínimos a su cargo, por ejemplo, dotar del personal de enfermería en salud mental, acompañamiento terapeútico y nutricionista, además de reclamar por aparatos adecuados para el tratamiento.
Mariano Ariel Perroni. Era el coordinador de enfermeros de la empresa "Medidom", subcontratada para aportar enfermeros y médicos a la internación domiciliaria de Maradona. Es apuntado por llenar planillas de atención médica, "omitiendo plasmar sus asientos de forma completa y adecuada, consignando deliberadamente información que no se condecía con el real estado y atención médica que Diego Armando Maradona recibía", según los fiscales.
Ricardo Omar Almirón, Dahiana Gisela Madrid y Pedro Pablo Di Spagna. Se trata de tres enfermeros que quedaron a cargo del cuidado del Diez. La fiscalía cree que los tres omitieron cumplir con los deberes a su cargo ya que se habrían abstenido, según los fiscales, de controlar regularmente el estado de salud del paciente.
La muerte de Diego Maradona
Maradona murió el 25 de noviembre de 2020 a los 60 años, cuando se encontraba en una casa del barrio privado de Tigre, a dos semanas de su externación de la Clínica Olivos, donde había sido sometido a una cirugía por un hematoma subdural.
La autopsia determinó que murió como consecuencia de un "edema agudo de pulmón secundario a una insuficiencia cardíaca crónica reagudizada" y descubrieron en su corazón una "miocardiopatía dilatada".
De acuerdo a los resultados de los estudios toxicológicos realizados, Maradona no tenía alcohol ni drogas ilegales en su organismo, aunque sí detectaron psicofármacos.
El foco de la investigación penal está puesto en determinar si la internación domiciliaria era la adecuada para un paciente como Maradona, si hubo mala praxis médica y si la muerte se pudo haber evitado.
A un año y siete meses de su muerte, además, las denuncias y acusaciones que enfrentan a los distintos integrantes de familia del futbolista y su entorno no encuentran fin. Además de la investigación por su muerte, en la Justicia hay otros expedientes en marcha con El Diez como protagonista, vinculados al robo de bienes y al uso de la marca.