Desde Roma
El ministro de Relaciones Exteriores de Italia, Luigi Di Maio, abandonó el Movimiento Cinco Estrellas (M5S) que lo había llevado al poder, según anunció él mismo el martes por la noche. Y fundó un nuevo partido llevándose, al menos hasta ahora, a 62 parlamentarios, 51 diputados y 11 senadores, todos del M5S. Algunos medios hablan en cambio de un total de 70 parlamentarios pero las cifras son todas provisorias por ahora.
De esta manera ili">el M5S pierde la mayoría parlamentaria que había logrado en las elecciones de 2018. Según la agencia italiana AdnKronos, dos de los siete representantes que el Movimiento tiene en el Parlamento Europeo se habrían pasado también al grupo de Di Maio. Entre los militantes del M5S que se pasaron al nuevo partido se encuentra la viceministra de la Economía, Laura Castelli, cuatro subsecretarios de distintos ministerios y cuatro presidentes de comisiones parlamentarias. El nuevo partido se llama “Insieme per il futuro” (Juntos por el futuro)
El anuncio de la creación de este nuevo partido, en menos de 24 horas desde que estallaron las últimas polémicas internas en el Movimiento a causa de la propuesta que haría Italia a Europa de enviar nuevas armas a Ucrania, dejó perplejos a muchos pero indica que las disputas internas, aunque no eran demasiado públicas, existían ya desde hace tiempo.
Sobre el nuevo envío de armas negado por el M5S y que por eso criticó duramente al canciller, Di Maio escribió en una nota: “Como ministro del Exterior he reiterado y continuaré reiterando que Italia no puede permitirse tomar posiciones contrarias a los valores Euro-Atlánticos. Valores de democracia, de libertad, de respeto de la personas y defensa de los Estados” (...) “Todos buscamos y queremos la paz. Mientras tanto Putin sigue bombardeando Ucrania, ignorando el pedido de la comunidad internacional de sentarse a negociar”. Y ante un escenario de este tipo, dijo además Di Maio, “los dirigentes de la primera fuerza política en el Parlamento (el M5S) deciden atacar al ministro de Exteriores y llevar adelante posiciones que ponen en dificultad al gobierno italiano en la sede de la UE. Una actitud poco madura que tiende a crear tensiones e inestabilidad en el gobierno. Un hecho muy grave”.
Antes de anunciar su decisión públicamente el martes por la noche, Di Maio fue al Palacio del Quirinale para informar al Presidente de la República, Sergio Mattarella. Después hizo una rueda de prensa en un hotel del centro de Roma en la que sin embargo no respondió a las preguntas de los periodistas. “Gracias al Movimiento por todo lo que ha hecho por mí”, empezó diciendo Di Maio en la rueda de prensa. Y continuó: “Dejo el Movimiento. Es una decisión muy dura que tuve que tomar. Nunca antes habría pensado que lo podía hacer. Pero hoy empieza un nuevo recorrido”. Y sobre el nuevo partido agregó: “Nacerá una fuerza política que no será personal, donde no habrá espacio para el odio, soberanismos y populismos (…) Desde mañana, el Movimiento no será más la primera fuerza política en el Parlamento”, concluyó.
“Debíamos elegir de que parte de la historia estar”, dijo Di Maio además hablando de la guerra en Ucrania y la división del M5S. Los dirigentes del Movimiento han arriesgado debilitar al país y poner en dificultad al gobierno por razones ligadas a la propia crisis de consenso” (N.D.R : que se vio muy disminuido en las recientes elecciones municipales).
Dirigentes del M5S por su parte, en especial el exprimer ministro Giuseppe Conte, negaron en todo momento que su intención hubiera sido poner en dificultades al gobierno o al mismo Draghi, y descartaron que el M5S fuera a desaparecer después de esta división. Lo que sucederá en realidad con el M5S sólo se podrá ver más adelante.
Nuevas armas a Ucrania
Mientras tanto la Cámara de Diputados italiana - luego de que ayer hiciera lo mismo el Senado- aprobó la propuesta del primer ministro Mario Draghi de enviar nuevas armas a Ucrania y aplicar nuevas sanciones contra Rusia, entre otras cosas. Propuesta que deberá presentar en el Consejo Europeo que se reunirá el 23 y 24 de junio en Bruselas para decidir nuevas medidas respecto a Ucrania. La propuesta italiana incluye además el apoyo a la candidatura de Ucrania para entrar a la Unión Europea y a la intervención de la ONU para desbloquear los puertos y evitar una crisis alimentaria sin precedentes.
“El gobierno italiano seguirá sosteniendo a Ucrania así como este Parlamento nos ha indicado hacer”, dijo Draghi hablando en el Senado donde, antes del discurso además, a los que le preguntaban si estaba preocupado por lo que estaba sucediendo en el M5S que podría desestabilizar su gobierno, dijo que no.
“La sanciones contra Rusia están funcionando - dijo además - . El Fondo Monetario Internacional prevé que esas sanciones podrían costarle a Rusia el 8,5 de su PIB (Producto Interno Bruto). El tiempo ha demostrado que estas medidas son siempre eficaces. Pero nuestros canales de diálogo siguen abiertos. No dejaremos de buscar la paz en los términos que elija Ucrania” (…) “Ucrania se debe defender. Las sanciones y el envío de armas sirven para eso”, añadió. Y a los parlamentarios que le preguntaron por qué no diseñar un plan de paz, Draghi dijo que “para diseñar un plan de paz se necesitan los dos implicados. En cambio uno de ellos sigue buscando la guerra mientras el otro dice que los rusos se deben ir y recién entonces se comenzará a hablar. Son dos posiciones inconciliables”.