Boca Juniors perdió 2-1 con Unión de Santa Fe en La Bombonera, por la quinta fecha de la Liga Profesional. 

Daniel Juárez, de penal, puso en ventaja al Tatengue, pero antes del descanso Eduardo Salvio empató transitoriamente también desde los once pasos. En un final caliente en el que el ingresado Carlos Izquierdoz vio la roja, el también ingresado Franco Troyansky con un último penal le dio la victoria al visitante, dirigido en esta ocasión por Christian Berman, ya que el uruguayo Gustavo Munúa padece coronavirus. 

Con este resultado, en la previa a jugar contra Corinthians la llave por octavos de final de Copa Libertadores, el equipo de Sebastián Battaglia tropezó dos veces en el torneo local y quedó a dos puntos del líder Gimnasia La Plata.

En el arranque del juego se vio cómo el conjunto visitante se abroquelaba y esperaba a su anfitrión en mitad de cancha. Eso dificultaba las cosas en el conjunto de Battaglia, que así y todo tuvo su primera aproximación con un zurdazo del activo Molinas, que Moyano contuvo sin problemas.

El juego pareció detenerse en el minuto 10, cuando toda La Bombonera le rindió un cariñoso tributo a su ídolo y actual vicepresidente, Juan Román Riquelme, presente en el estadio y que este viernes sopló 44 velitas.

Enseguida, una fenomenal salida del arquero Javier García terminó dejando en posición inmejorable a Salvio, que no pudo vulnerar al arquero tatengue, quien poco después, tras una nueva incursión en ataque del colombiano Fabra, volvió a ahogarle el grito de gol al mismo Salvio.

Entonces, en la primera acción santafesina de peligro, Campuzano se llevó puesto a Nardoni dentro del área y Juárez cambió penal por gol.

Boca sintió el golpe y, tras un corner, hubo un mutuo agarrón de camiseta entre Agüero y Figal dentro del área, pero el VAR dictaminó que la acción no era para pena máxima.

Sin embargo, en la jugada siguiente, una corrida de Medina rumbo al área fue interrumpida groseramente por Esquivel. Esta vez Yael Falcón Pérez no dudó en pitar penal y Salvio señaló el empate con el que ambos equipos se irían al descanso.

El complemento encontró a Unión aún más replegado, pero Boca carecía de profundidad. Ingresaron Zeballos y Villa, y entre los dos fabricaron una jugada que culminó con el remate del colombiano apenas arriba. 

Tras un error garrafal de Weigandt, Zenón tuvo de tiro libre una chance para Unión, que en un final tumultuoso (se jugaron 15 minutos adicionales) se quedó con la victoria con otro penal a cargo de Troyansky -en verdad pateó dos, ya que el primero fue atajado por adelantamiento de García- y dejó a Boca con las manos vacías.