La policía noruega abrió este sábado una investigación por un "acto terrorista" y "crimen de odio" tras un tiroteo ocurrido anoche contra tres bares del centro de Oslo, que dejó dos muertos en un pub gay, y que provocó la cancelación de la Marcha del Orgullo LGTBIQ+ prevista para esta tarde en esa ciudad.
El autor de los disparos, que además dejó 21 heridos, es un hombre noruego de origen iraní, de 42 años, conocido por los servicios de inteligencia interior, también encargados de antiterrorismo, informó este sábado la Policía noruega. Y fue detenido 20 minutos después.
"Es sospechoso de homicidio, intento de homicidio y acto terrorista", dijo Christian Hatlo, jefe policial, en una conferencia de prensa. "Por el número de heridos y de muertos, el número de escenas del delito -al menos tres-, existen buenas razones para creer que tenía la intención de sembrar el terror", añadió, según AFP.
El tiroteo se produjo alrededor de la 1 hora local (las 20 de este viernes en Argentina), en el exterior del local gay, "Per på hjørnet", donde murieron las dos personas. Después, el atacante continuó disparando delante de un club aledaño, el "London Pub", que estaba repleto de gente.
"Existen razones para pensar que se trata de un crimen de odio", agregó Hatlo, mencionando el tipo de bares atacados, "en especial, el London Pub".
Por este motivo, la Marcha del Orgullo LGTBIQ+, que tenía que celebrarse esta tarde en Oslo, fue suspendida, como muestra de solidaridad.
"El tiroteo en el exterior del London Pub de Oslo es un ataque horrible y profundamente espantoso contra inocentes", publicó en Facebook el primer ministro noruego, Jonas Gahr Store.
Cómo fue el ataque
El sospechoso, de quien no se informó su identidad, tenida antecedentes policiales por infracciones como portar un cuchillo y posesión de drogas.En el lugar donde atacó anoche, se incautaron dos armas: una automática y una corta, que de acuerdo a la Policía, eran "antiguas".
"Tenía aspecto muy decidido sobre el lugar al que apuntaba. Cuando entendí que era grave, corrí. Había un hombre sangrando en el suelo", relató una testigo al diario noruego Verdens Gang (VG). Otra persona contó que usaba un arma automática, aunque esto no fue confirmado oficialmente. "Era una escena de guerra", dijo este testigo. "Había en el suelo muchos heridos que tenían heridas en la cabeza", contó.
Un periodista de la radiotelevisión pública NRK que estaba en el lugar al momento del ataque explicó que el atacante llegó con una bolsa de la que sacó el arma con la que disparó.
El 22 de julio de 2011, Noruega fue escenario el de un ataque realizado por el neonazi Anders Behring Breivik, que mató a 77 personas en un atentado bomba contra la sede del gobierno en Oslo y disparó contra una reunión de jóvenes del partido laborista en la isla de Utoya.