Manifestantes en favor del derecho al aborto se movilizaron por todo Estados Unidos por segundo día consecutivo contra el fallo de la Corte Suprema. Mientras, los estados conservadores comienzan a prohibir las interrupciones voluntarias de embarazos. "Vinieron tras las mujeres. Vendrán tras la comunidad LGBT y la anticoncepción", exclamó una mujer en medio de la protesta.
El país está viviendo una nueva polarización, entre los estados que ya están negando, o se preparan a hacerlo, el derecho al aborto, vigente desde hace cincuenta años, y los que lo mantienen. Tras las protestas que se prolongaron hasta altas horas de la noche del viernes, varios cientos de personas volvieron a las calles el sábado, en particular en Washington, frente a la cercada sede la Corte Suprema de Justicia.
"Guerra contra las mujeres, ¿quién sigue?" y "Sin útero, sin opinión", decían algunos de los carteles desplegados por los manifestantes. También se están realizando manifestaciones similares en Los Ángeles, una dirigida al ayuntamiento y la otra al juzgado federal, y en decenas de ciudades de todo el país. La mayoría de las movilizaciones del viernes transcurrieron sin incidentes, aunque la policía lanzó gases lacrimógenos contra los manifestantes en Phoenix, Arizona, y en la ciudad de Cedar Rapids, en Iowa, una camioneta atravesó en medio de un grupo de manifestantes y atropelló a una mujer.
Al menos ocho estados de tendencia derechista ya impusieron prohibiciones del aborto, y un número similar hará lo mismo en las próximas semanas luego de que la corte eliminara las protecciones constitucionales para el procedimiento vigentes desde hace casi medio siglo, lo que generó críticas de algunos de los aliados más cercanos de Estados Unidos en todo el mundo. Muchos temen que la Corte Suprema, que desde la administración de Donald Trump tiene una composición mayoritariamente conservadora, se enfoque ahora en el derecho al matrimonio entre personas del mismo sexo y la anticoncepción.
El presidente Joe Biden, quien también expresó su preocupación de que la corte no se detenga en el aborto, se pronunció nuevamente el sábado en contra del "impactante" fallo del máximo tribunal. "Sé lo dolorosa y devastadora que es esta decisión para muchos estadounidenses", dijo en la Casa Blanca.
"Lamentablemente, vamos a asistir a algunos escenarios de pesadilla", dijo la portavoz de Biden, Karine Jean Pierre, a periodistas en el avión presidencial rumbo a Europa para participar en las cumbres del Grupo de los Siete y la OTAN. "No se trata de una hipótesis", comentó.
Para la derecha religiosa el fallo del viernes representa una victoria, pero su objetivo final es mucho más ambicioso: lograr que el aborto sea prohibido en todo el país. Ese objetivo ahora está al alcance en alrededor de dos docenas de estados. Misuri fue el primero en prohibir el procedimiento el viernes, en todos los casos, y en la mañana del sábado se le sumaron otros siete: Alabama, Arkansas, Kentucky, Louisiana, Oklahoma, Dakota del Sur y Utah.
Varios estados gobernados por demócratas, anticipando una afluencia de pacientes, ya han tomado medidas para facilitar el aborto y tres de ellos (California, Oregón y Washington) publicaron una declaración común para defender el acceso a estas intervenciones. Pero viajar es caro y la decisión de la Corte Suprema penalizará aún más a las mujeres pobres o que crían solas a sus hijos, que están sobrerrepresentadas en las minorías negra e hispana, subrayan los defensores del derecho al aborto.
En el mundo
El primer ministro canadiense Justin Trudeau, afirmó que consideraba "horrenda" la decisión de la Corte Suprema e indicó que su país seguirá permitiendo a las mujeres estadounidenses abortar en Canadá. “Sabemos que este es un momento no sólo aterrador, sino sumamente desalentador para muchas mujeres”, señaló Trudeau en una conferencia de prensa en Kigali, Ruanda, durante la Reunión de Jefes de Gobierno de la Commonwealth.
En Francia, el gobierno de Emmanuel Macron hizo saber que es posible que el derecho al aborto sea consagrado directamente en la constitución nacional.
"Los derechos reproductivos son parte integral de los derechos de las mujeres, un hecho que está respaldado por acuerdos internacionales y reflejado en leyes en diferentes partes del mundo", expresó ONU Mujeres en un comunicado. El organismo subrayó que "los derechos reproductivos son derechos de la mujer y derechos humanos" y explicó que para poder ejercerlos es esencial que las mujeres puedan "decidir libre y responsablemente el número de sus hijos".
El Fondo de Población de las Naciones Unidas (Unfpa) destacó que "sea legal o no, el aborto sucede con demasiada frecuencia" y es una de las principales causas de muerte materna. Se basaron en el informe de Estado de la Población Mundial 2022, el cual reveló que "más del 60 por ciento de los embarazos no deseados pueden terminar en aborto. Un asombroso 45 por ciento de todos los abortos en todo el mundo son inseguros, lo que los convierte en una de las principales causas de muerte materna".