Un hombre de 25 años se presentó en la Comisaría 2° de la ciudad de San Luis y afirmó haber asesinado a Guadalupe Belén Lucero, la niña que desapareció el 14 de junio del 2021 en el barrio 544 Viviendas. La presentación la hizo ayer, miércoles, a las 15.30. Y esta mañana, la fiscal de San Luis, Virginia Palacios Gonella, dio una conferencia de prensa informando que había intervenido en el caso ordenando perimetrar la zona donde había el denunciante había dicho que había depositado el cadáver, para luego ceder la participación a la justicia federal. 

Lo curioso del caso es que la fiscal provincial, que es criticada por la madre de Guadalupe por frenar la causa, no debía intervenir porque la investigación está en manos de un equipo de fiscales federales, y que la policía provincial debería haber informado directamente a esos fiscales federales, que recién fueron informados esta mañana, en lugar de a Palacios. La denuncia del hombre, que está siendo investigada (no fue incriminado aún porque se trata de un paciente psiquiátrico), y la aparición en escena de Palacios, se produjo a las 15.30, con tiempo suficiente para cumplir el protocolo, y se realizó en simultáneo a la reconstrucción del momento previo a la desaparición de la niña, que está cumpliendo el equipo federal.

La justicia federal, que reemplazó a la provincial, conformó un equipo de investigadores integrado por el fiscal federal subrogante de San Luis, Cristian Rachid, el fiscal general Marcelo Colombo y la fiscal federal Alejandra Mángano -cotitulares de la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (PROTEX)-, y el fiscal federal Leonel Gómez Barbella.

El lugar que fue perimetrado por la fiscal provincial, según informó la misma Palacios durante la conferencia de prensa, fue la localidad de Potrero de los Funes, a 24 kilómetros de la capital de San Luis.

"Inmediatamente nos constituimos en la comisaría para saber la entidad de lo que se estaba informando --sostuvo la fiscal provincial en la conferencia--. En la comisaría se tomaron medidas preliminares. Se tomó una entrevista a la madre y a él". También explicó que el autodenuciante sufre "una patología de tipo psiquiátrica". 

Palacios dijo a los medios que ordenó "inmediatamente el resguardo de la zona" y aclaró que "no se llevó a cabo ningún rastrillaje, no hubo excavaciones. Ordené que se constituyera policía para trazar tres perímetros".

"Participamos y lo único que hicimos fue preservar --insistió ante las preguntas de los medios por su llamativa intervención--. Nadie entró al lugar, se resguardó y se le comunicó al fiscal federal que estábamos a su disposición", sostuvo la fiscal.

Fuentes de la investigación señalaron a Página/12 que la fiscal entregó a la justicia federal la información durante la mañana, antes de iniciar la conferencia de prensa, aunque hubo el tiempo suficiente como para informar ya que el denunciante se presentó el miércoles aproximadamente a las 15.30 en la comisaría 2ª de San Luis. 

"Lo más raro es que la policía de San Luis tenía la obligación de avisar automáticamente a los fiscales federales y no a la fiscal provincial, porque es la justicia federal la que está interviniendo. Todo muy raro", concluyó la misma fuente.