El frentetodismo parlamentario se prepara para despedir con dos victorias la última semana legislativa antes de que comience el receso invernal. Y nada de lo que ocurrió el fin de semana parece cambiarlo. El martes, la Cámara de Diputados tratará (y probablemente apruebe) una serie de proyectos económicos y vinculados a la Salud que pondrán a jugar nuevamente la articulación de alianzas circunstanciales con los bloques del medio. Se tratarán leyes como la Promoción de la Industria Automotriz y Cuidados Paliativos, que se espera que salgan casi por unanimidad, mientras que la iniciativa que crea un área marina protegida donde se hundió el ARA San Juan anticipa una votación más ajustada (ya que gran parte de Juntos por el Cambio votará en contra). El jueves, mientras tanto, el Senado debatirá el proyecto de los gobernadores que amplía la composición de la Corte Suprema a 25 integrantes. Si bien los números están ajustados, el oficialismo confía que tendrá el acompañamiento de dos aliadas clave para conseguir la media sanción.
Agenda de consenso
El escenario de paridad de fuerzas en la Cámara de Diputados obliga a las dos principales coaliciones -el Frente de Todos y Juntos por el Cambio- a tener que andar con cuidado a la hora de convocar sesiones especiales. Las alianzas con los bloques minoritarios -con el Interbloque Federal a la cabeza, pero también con los rionegrinos y misioneros que integran Provincias Unidas o los libertarios o diputades de izquierda-- son versátiles y pueden cambiar a último momento. Lo que sucedió con la Ley de Alquileres -iniciativa para la cual la oposición tenía ya todo planeado para sesionar el 30 de junio pero se terminó cayendo debido a desacuerdos internos-- fue una muestra de la fragilidad de algunos acuerdos y de que se debe apostar a iniciativas que tengan una base de consensos asegurada. Es por este motivo que el oficialismo, por ejemplo, no llevará aún al recinto el proyecto que crea un fondo con los dólares evadidos en el exterior para cancelar la deuda con el FMI: los votos no están.
En línea con esta tendencia de apuntar a proyectos "de consenso" es que el bloque oficialista liderado por Germán Martínez convocó a una sesión para el próximo martes a las 13 horas. El plato caliente del temario será un proyecto que promueve inversiones en toda la cadena de valor de la industria automotriz, una iniciativa que había sido originalmente impulsada por el ex ministro Matías Kulfas pero que Daniel Scioli retomó al asumir en la cartera de Desarrollo Productivo. El proyecto prevé beneficios fiscales --como la devolución anticipada del IVA y la eliminación de los derechos de exportación hasta el 2031-- y cuenta con el acompañamiento de casi todo el arco opositor, JxC incluido. Lo mismo sucede con la ley de promoción de la Bio y Nanotecnología --que prorroga un régimen de beneficios fiscales--; la de cuidados paliativos --que asegura el acceso de les pacientes a las prestaciones sobre cuidados paliativos en el ámbito público y privado--; y la de resistencia Anti microbiana.
Diferente es el caso del proyecto "Agujero Azul", una iniciativa impulsada por Graciela Camaño que crea un área marina protegida en una superficie de 164 mil kilómetros cuadrados donde yacen los restos del submarino ARA San Juan. En este caso, el FdT logrará aprobar la iniciativa gracias al acompañamiento del Interbloque Federal y Provincias Unidas, ya que JxC se opone al proyecto (aunque se desconoce aún que hará el bloque PRO que, a diferencia del resto del interbloque, podría abstenerse).
Ampliación de la Corte
En el Senado, mientras tanto, el FdT adelantó para este jueves la sesión que tratará la ampliación de la Corte Suprema de Justicia. El proyecto es impulsado por la "liga de gobernadores", un grupo de mandatarios peronistas (y aliados) que busca instalar una agenda federal y que se presentó en la Cámara alta el último miércoles para defender la ley en una reunión plenaria. La iniciativa propone una Corte Suprema federal y paritaria de 25 integrantes: un juez o jueza por cada provincia, más otro designado por el Poder Ejecutivo. Los cuatro supremos actuales --un cordobés, dos santafesinos y un porteño-- se mantendrían en sus cargos y se cubrirían sólo las vacantes.
"Los votos están", aseguró un senador oficialista al tanto de las negociaciones. Y es que dado el rechazo de JxC al proyecto -les senadores cambiemitas ni siquiera participaron del debate en comisión-, el FdT se muestra confiado en que logrará alcanzar los 37 votos que se necesitan para aprobar la iniciativa en el recinto. De les dos aliades habituales, el oficialismo sólo podrá contar con el apoyo de la misionera Magdalena Solari Quintana, ya que Alberto Weretilneck anticipó que esta vez defenderá el proyecto de su autoría (el cual establece una Corte de 16 integrantes basado en una representación federal que divide al país en cinco regiones). "No va a negociar nada", aseguraron desde el entorno del rionegrino a este diario.
El ojo, por lo tanto, estará puesto en la riojana Clara Vega, senadora que ingresó al Congreso como parte de una alianza con JxC pero que terminó rompiendo con el interbloque opositor y ahora se muestra cada vez más cercana al oficialismo. Vega tiene su propio proyecto de reforma de la Corte (el cual sostiene solo la paridad de género en la composición) y, si bien primero dijo que 25 integrantes le parecía "excesivo", en los últimos días comenzó a deslizar que el proyecto le resultaba "interesante". En el FdT, mientras tanto, anticipan que votará a favor y garantizará así la media sanción al proyecto.