La Justicia de Pergamino absolvió este lunes a la mujer víctima de violencia de género que fue juzgada como acusada de matar de un balazo a su pareja, cuyo cuerpo fue hallado descuartizado en la ciudad bonaerense de Colón en 2019, al considerar que actuó en legítima defensa.
El veredicto absolutorio fue dictado por el Tribunal Oral Criminal (TOC) 1 de Pergamino en favor de Mafalda Beatriz Secreto (65), al cabo del juicio por el crimen de José Luis Arenas (60).
En los alegatos, que se realizaron el 16 de junio pasado, la fiscalía había solicitado una condena de 18 años de prisión para la mujer por el delito de "homicidio agravado por la relación de pareja en estado de emoción violenta". Si bien entendían que la acusada tuvo "cierta perturbación de la conciencia" a raíz de distintos episodios sufridos previo al crimen, consideraron que no alcanzó para calificarlo como una legítima defensa.
Por su parte, la abogada defensora de la imputada, Raquel Hermida Leyenda, había pedido al tribunal la absolución y que se considerara como atenuante la "emoción violenta", ya que Secreto era víctima de constantes agresiones por parte del hombre asesinado.
Según dijo entonces, el día del crimen la acusada -quien llegó al debate oral con el beneficio del arresto domiciliario- "padeció un trastorno mental transitorio" y luego "del disparo o los disparos sufrió una amnesia disociativa que no es simplemente de olvidarse de las cosas, es ser otra persona".
Había dicho que la mujer "es una conocida costurera y modista de la ciudad de Colón" y que, apenas comenzada la relación de pareja con Arenas, el hombre empezó a amenazarla, hostigarla verbalmente y ejercer violencia física contra ella.
Además, según el relato de la propia víctima, Arenas "la drogaba" y cuando se hallaba en estado de somnolencia hacía ingresar a la casa en la que convivía con la víctima a hombres que la violaban.
Sin embargo, el quiebre de Secreto, según su abogada, fue advertir que un día su nieto, al que estaba cuidando, también había sido drogado, al tiempo que Arenas le dijo que iba a vender su casa, además de amenazarla "con prostituir a sus hijas y a su nieta". Esa noche, "él se pone en la cama, pone una de sus armas sobre su pecho y le dice que vaya a buscar algo a la cocina. Ella se levanta y sobre el escritorio ve la otra arma, vuelve al dormitorio y le dispara", señaló la letrada a Télam.
El cuerpo de Arenas fue encontrado el 1 de junio de 2019 en una vivienda ubicada en la calle 11 entre 50 y 51, de Colón, localidad ubicada a 50 kilómetros de Pergamino.
Según informaron voceros judiciales, esa mañana Secreto fue a la casa de su hermano para decirle que había asesinado a su pareja y que necesitaba ayuda para deshacerse del cadáver. Horas después, el hombre se presentó en la comisaría local para informar el homicidio a la Policía.
Ante esta situación, los efectivos concurrieron a la vivienda de la hermana del denunciante y encontraron a la mujer, quien reconoció el hecho, por lo que fue trasladada a la seccional, mientras que los peritos hallaron el cadáver de Arenas en un galpón ubicado en el fondo del terreno, tapado con la lona de una pileta.
El cuerpo estaba boca abajo y descuartizado, ya que le faltaban los miembros inferiores a la altura de la rodilla, y el brazo derecho desde el codo, y además presentaba un balazo en el maxilar derecho que, según la autopsia, fue lo que le provocó la muerte.