El árbitro chileno Roberto Tobar cambió su percepción en la jugada del tanto anulado al delantero de River Matías Suárez ante Vélez en la revancha de octavos de final de la Copa Libertadores a partir del intercambio con sus asistentes de la cabina VAR, según se comprueba con los audios publicados este jueves por la Conmebol.
"Para mí es gol", sostuvo el juez principal en su primera impresión tras revisar la acción en el monitor ubicado sobre el campo del estadio Monumental. "No me parece (mano)", reafirmó un ratito después en su diálogo con los brasileños Rafael Traci y Braulio Machado, encargado y asistente del VAR, respectivamente.
La jugada de la gran polémica se produjo en el minuto 78, cuando Suárez convirtió un gol de cabeza a centímetros de la línea del arco de Vélez, apareado en el salto por el defensor Francisco Ortega.
Tobar convalidó el tanto en primera instancia y todo era celebración en el estadio Monumental porque River lograba el 1-0 que le permitía al menos llevar la definición a los penales después de perder por ese mismo resultado en Liniers, una semana atrás. Sin embargo, segundos después del tanto, mientras la jugada era revisada por los integrantes de la cabina desde distintos ángulos y con diferentes velocidades, Machado (AVAR) advirtió al árbitro del encuentro: "Roberto: no reanudes (el juego), estamos chequeando una posible mano del delantero".
"Haz un looping lento (un bucle)", pidió Traci (VAR) a los técnicos en busca de una mayor precisión para determinar la posible infracción de Suárez, quien saltó con su brazo izquierdo extendido para defender su posición ante la cercanía del rival. "Ahí pega en la mano", detectó el AVAR, antes que su compañero invitara a Tobar a resolver la jugada frente a la pantalla. Entonces allí se produjo el intercambio que marca que el árbitro chileno no estaba convencido de cobrar mano y cambió su decisión por influencia del VAR.
"Punto de contacto y cambio de dirección", afirmó Machado para justificar la influencia de la supuesta infracción en el desenlace de la acción. "Para mí es gol", contradijo Tobar en una de las primeras repeticiones que vio, en la imagen desde atrás del arco. "Al inicio toca en el codo y hay un cambio de dirección", señaló Traci. "Esta creo que es la mejor imagen, cabecea y el balón cambia", insistió Machado. "No me parece, a ver, dale de nuevo", dudó Tobar durante un procedimiento que llevó varios minutos.
La jugada se observó con diferentes cámaras, a distintas velocidades y con la imagen detenida también, algo que no está contemplado en el protocolo VAR de la International Football Association Board (IFAB), el organismo que dictamina las reglas del juego. "(…) Se utilizará la velocidad normal para comprobar la 'intensidad' de una infracción o decidir si se ha cometido infracción por mano", establece el reglamento.
"Pega en la mano, sí. Mira que el delantero cabecea, pega en su brazo y cambia la dirección (de la pelota)", fue la última afirmación de Machado, que terminó de convencer a Tobar para modificar su decisión inicial de convalidar el gol. A partir del intercambio, el chileno volvió hacia al campo de juego y en su recorrido señaló su brazo izquierdo para indicar la infracción a los espectadores, por lo que luego marcó el tiro libre en favor de Vélez desde el área menor. De esa manera dejó el resultado sin alteración y le permitió al visitante asegurar su clasificación en los minutos finales.
Al término del partido, el DT de River, Marcelo Gallardo, y alguno de sus jugadores fueron a cuestionarle a Tobar su proceder en medio del desencanto por la eliminación.
"Si realmente hay que buscar algo por buscar, sin tener certezas de lo que se busca, o revisar sin tener certeza de lo que estás queriendo encontrar, ahí lamentablemente sí hay un dejo de injusticia total. Es lo que se refleja en la jugada misma, en el criterio para cobrar algo que no estás seguro que existe", criticó Gallardo en conferencia de prensa.
"No tengo mucho más cosas para decir, no me salen otra cosas que sentir que hoy fuimos perjudicados por esa jugada, por ese fallo que no se ve, no hay claridad… Pero, bueno, la injusticia es la que en este momento nos apaña. Después está la desilusión de querer llegar muchos más lejos en esta Copa Libertadores", concluyó.
Además de las consecuencias deportivas por la eliminación, River perdió el premio de 2.000.000 de dólares que entrega la Conmebol a los clubes clasificados a los octavos de final de la Libertadores.