Las personas declaradas culpables de ciberacoso en Japón podrán recibir penas de hasta un año de cárcel, de acuerdo a una nueva ley que entró en vigencia este jueves. El cambio en la legislación se produjo a partir del suicidio de una joven deportista que había sido víctima de esta forma de violencia.

A partir de ahora, el Código Penal nipón prevé multas de un máximo de 300 mil yenes (aproximadamente 2.050 dólares) y penas de hasta un año de prisión. Antes se castigaba con 10 mil yenes (74 dólares) y hasta 30 días de cárcel.

El ministro de Justicia, Yoshihisa Furukawa, dijo que estas sanciones reforzadas tienen como objetivo dejar claro que el ciberacoso es un delito.

"Es importante que nos esforcemos por erradicar los insultos maliciosos" que a veces pueden provocar la muerte de las personas a las que van dirigidos, destacó en una conferencia de prensa esta semana.

La muerte de Hana Kimura

Una de las principales impulsoras para el endurecimiento del Código Penal fue la madre de Hana Kimura, una luchadora profesional que también había participado en el programa “Terrace House”, emitido por Netflix. La joven de 22 años se suicidó después de haber sido víctima de ciberacoso.

Kyoko Kimura, la madre de Hana, celebró ante los periodistas la aprobación de esta revisión ante el Parlamento el mes pasado. La muerte de la deportista aumentó la presión social sobre los representantes electos para endurecer la legislación.

Pero algunos defensores de la libertad de expresión y expertos legales, que se oponen a estas sanciones más severas, pidieron al gobierno que se asegure de que no se utilicen para restringir la libertad de expresión y la crítica política.