Una enmienda introducida en la Ley de Autorización de Defensa Nacional (NDAA, en inglés), que contempla el gasto en Defensa anual de Estados Unidos (EE.UU.) para 2022, insta al gobierno de Joe Biden a investigar si las Fuerzas Armadas brasileñas están interfiriendo en las elecciones presidenciales del 2 de octubre, informó este jueves Folha de S. Paulo.

"Dentro de los 30 días siguientes a la promulgación de la ley NDAA, el Secretario de Estado deberá presentar un informe al Congreso sobre todas las acciones realizadas por las Fuerzas Armadas de Brasil en relación con las elecciones presidenciales del país, previstas para octubre de 2022", prevé la enmienda 893, incluida en el proyecto de ley de presupuesto para el año fiscal 2023, finalizado esta semana.

El documento cita aspectos a investigar: interferencia en el conteo de votos, manipulación para tratar de revertir el resultado y participación en campañas de desinformación para cuestionar el sistema electoral y los resultados a través de protestas, redes sociales u otros medios de comunicación.

Si se verifican algunos de estos puntos, Brasil podría quedar enmarcado en la Sección 7008, que prevé el fin de la asistencia de seguridad de EE. UU. a países en los que haya un golpe de Estado o ataques militares a la democracia, lo que podría poner en peligro la condición de Brasil como un aliado importante, aunque no perteneciente a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), obtenido en 2019.

La posición convierte a Brasil en un socio militar preferente de la OTAN, con fácil acceso a la compra de equipos militares, algunos a precio de costo, además de cooperación para entrenamiento e investigación de nuevas tecnologías.

La enmienda 893 fue propuesta por el representante demócrata Tom Malinowski de Nueva Jersey, junto con sus compañeros demócratas Albio Sires (Nueva Jersey), Joaquín Castro (Texas), Susan Wild (Pensilvania), Ilhan Omar (Minnessota) y Hank Johnson (Georgia). La propuesta, al igual que el presupuesto de Defensa, debe ser aprobada por el Congreso, en un proceso que debe concluir en octubre, cuando comienza el ejercicio fiscal.

Militares dudan de la transparencia del sistema electoral

Este miércoles, el ministro de Defensa de Brasil, Paulo Sérgio Nogueira, volvió a cuestionar la seguridad de las urnas electrónicas de cara a los próximos comicios, y aseguró que es un sistema que "siempre necesita mejoras", a pesar de que los equipos pasan por varias etapas de preparación e inspección interna en el ámbito del Tribunal Superior Electoral (TSE).

En un discurso de más de 40 minutos ante la Comisión de Relaciones Exteriores y Defensa Nacional de la Cámara de Diputados, el general se refirió al desempeño de los militares en varios ámbitos de contralor y citó las elecciones. "Sabemos muy bien que este sistema electrónico siempre necesita mejoras. No hay ningún programa que sea inmune a los ataques, inmune a los hackeos. Hay bancos que gastan millones en seguridad y me clonaron la tarjeta hace tres semanas. A mi esposa, el año pasado. Esto es un hecho", dijo.

El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, quien busca la reelección y aparece segundo en las encuestas a más de dos dígitos de Luiz Inácio Lula da Silva, ha expresado en repetidas ocasiones sus dudas sobre el mecanismo con el que fue elegido para el cargo, afirmando que las urnas electrónicas no son auditables -aunque lo son- y defendiendo la aplicación del voto impreso, considerado un retroceso por parte de la Justicia Electoral.

El mandatario y los militares afirman que su intención es salvaguardar las elecciones. "Por el amor de Dios, nadie está realizando actos antidemocráticos", dijo Bolsonaro recientemente. "Una elección limpia, transparente y segura es una cuestión de seguridad nacional. Nadie quiere tener dudas cuando las elecciones hayan terminado", añadió.

La falta de fiabilidad de las elecciones puede llevarlo a cuestionar el resultado, advirtió Bolsonaro. "Ha surgido una nueva clase de tramposos que quieren robar nuestra libertad", dijo durante un evento el mes pasado. "Iremos a la guerra si es necesario", añadió.

En la misma línea, el hijo mayor del presidente, el senador Flávio Bolsonaro, advirtió la semana pasada que el gobierno no puede ser responsabilizado si el resultado de las elecciones genera una reacción violenta por parte de los seguidores del presidente.

El Ministerio de Defensa también dijo hace algunas semanas en un comunicado que "las Fuerzas Armadas actúan en estricta obediencia a la ley y la Constitución y se dirigen a defender la patria, garantizar los poderes constitucionales y, a través de cualquiera de ellos, de la ley y el orden".