El diputado nacional Sergio Massa (Frente Renovador) abogó hoy para que el Congreso discuta "entre paréntesis" de las elecciones legislativas de octubre la baja de la edad de imputabilidad, como reclamaron desde el gobierno, y afirmó que "en el caso de homicidio tiene que haber la misma pena para un menor que para un mayor". Lo dijo en referencia al caso del asesinato de Agustín Bustamente, el niño de tres años baleado en Lomas de Zamora. Massa sostuvo que una ley de ese tipo "requiere consensos" pero que el debate "siempre está cruzado por las pseudo posiciones ideológicas que traen discusiones intrabloque", por lo que consideró que "es un tema que hay poner entre paréntesis de la discusión electoral y abordar seriamente como país".
No fue el único en retomar el tema de la baja; también la vicepresidenta Gabriela Michetti volvió sobre el asunto al afirmar hoy en diálogo con radio Mitre que es muy “necesaria” la modificación del régimen penal juvenil y consideró "razonable" que se retrotraiga a 14 años la edad de imputabilidad del asesinato. Para eso, aseguró que "el Senado está preparado para dar esa discusión" y que "no podemos dar la excusa de que hay un tema de tiempo electoral". "Esto hay que hacerlo sí o sí. Hay varios proyectos presentados hace tiempo que van en ese sentido, es muy necesario que evaluemos esto a fondo", dijo Michetti.
Por su parte, el secretario de Seguridad Interior, Gerardo Milman, advirtió ayer que el Congreso nacional está en "deuda" en la discusión de un "régimen penal juvenil" para evitar que permanezcan como inimputables los "menores de 16 o 17 años" que cometen crímenes violentos.
La polémica sobre la baja de la edad de imputabilidad ya había sido reavivada en enero de este año tras la muerte de Brian Aguinaco durante un intento de robo en el barrio de Flores. Después de ese episodio el Gobierno –a través del ministro de Justicia Germán Garavano– prometió una reforma del Código Penal y trabajar en la elaboración de un proyecto de ley para tratar después de las elecciones legislativas de octubre. En ese momento la propuesta recibió un aluvión de rechazos que fueron desde críticas al hecho de hacer un anuncio de esa naturaleza en un año electoral hasta la inconstitucionalidad de ese tipo de reformas.
El premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel subrayó entonces a Página/12 que el recurso de bajar la edad para encarcelar a los chicos “viola el derecho de la infancia” y “no soluciona absolutamente en nada” el problema de la inseguridad. Y catalogó a la propuesta oficial como una “aberración humanitaria y jurídica”.
Los argumentos contrarios a la baja también pusieron el foco en la falta de sustento estadístico de la iniciativa oficial: las estadísticas Centro de Admisión y Derivación de Adolescentes en Conflicto con la Ley Penal de la Ciudad de Buenos Aires (CAD) muestran la baja incidencia de los menores de 16 años en delitos graves. Según los registros del CAD la mayoría de los ingresos (53,5 por ciento) es por delitos contra la propiedad sin armas y de ese total, casi la mitad (44,6 por ciento) es robo en grado de tentativa, es decir, no llega a producirse.