El precandidato del Partido de los Trabajadores (PT) a la Presidencia de Brasil, el exmandatario Luiz Inácio Lula da Silva, responsabilizó este sábado al actual mandatario y su rival en los comicios, Jair Bolsonaro, por el hambre y el desempleo que sufre el país, al hablar en un multitudinario acto en San Pablo.
"Después de que el PT acabó con el hambre en este país, nos damos cuenta de que 33 millones de brasileños se van a dormir sin tener que comer, que 105 millones de personas tienen un problema de insuficiencia alimentaria. ¿Cómo se explica que en un país que es el tercer mayor productor de alimentos del mundo la gente se vaya a dormir sin comer?", dijo Lula.
Lula da Silva, que según los sondeos podría ganar en primera vuelta el 2 de octubre, lamentó que Brasil tenga actualmente 33 millones de personas que padecen hambre, 105 millones en situación de inseguridad alimentaria y que hayan vuelto al "Mapa Mundial del Hambre", a pesar de ser uno de los mayores productores de alimentos del mundo.
"No es falta de capacidad productiva, es falta de dinero y esta falta de dinero es por el desempleo y el desempleo es por la falta de vergüenza en los rostros de los que gobiernan este país", declaró en un acto celebrado en Diadema, en la periferia de la capital paulista, junto su candidato a vice, Geraldo Alckmin.
También recriminó a los empresarios que "solamente" se preocupen de sus planes de política fiscal y "no abran la boca" para hablar de los salarios de los trabajadores.
"Queremos que la empresa progrese, pero me enojo muchísimo cuando hago una reunión con empresarios y solamente quieren saber de techo fiscal, política fiscal, garantía fiscal... No hay uno que abra la boca para hablar dónde está la garantía social", aseguró el líder izquierdista.
Lula advirtió a sus seguidores que si gana las elecciones de octubre, tendrá un país peor que del de 2003, cuando fue elegido para el cargo por primera vez.
"Tienen que saber que vamos a tener un país peor que el que teníamos en 2003. La inflación es más alta, las tasas de interés son más altas, el desempleo es más alto y lo que es más grave: la masa salarial es mucho menor. Hoy más del 80% de las categorías profesionales hicieron convenio el año pasado hicieron convenio con menos inflación. Es decir, ni siquiera fueron capaces de restablecer la tasa de inflación", declaró.
En este sentido, prometió subir "el salario mínimo por encima de la inflación" y derogar el techo de gastos que hoy los limita a la subida de los precios del año anterior. "Vamos a gastar", sentenció.
El exmandatario llamó "fascista" a Bolsonaro y criticó su gestión, a la que le atribuyó el aumento del hambre al culparle de los "33 millones de brasileños que hoy se van a dormir sin tener algo que comer".