El ministro de Defensa, Jorge Taiana, confirmó que "habrá relevo de los jefes de la unidad" en el Regimiento de Monte 30, de Misiones, tras las lesiones graves sufridas por el cabo Michel Natanel Verón durante un "bautismo". "No solo es inaceptable, durante esta semana se ha desplegado una misión del Ejército, esto de los bautismos no va más", sentenció Taiana.
El ministro dijo estar "muy molesto con lo que pasó con el soldado" y recordó que sufrió una fractura de vértebra durante el "bautismo" que le realizaron a él y a otros jóvenes, egresados como cabos de la escuela militar. El rito de iniciación ocurrió en el Club de Suboficiales de la localidad de Apóstoles, donde la familia denunció que Michel fue humillado y forzado a tomar bebidas alcohólicas, entre otros abusos.
"Es un soldado voluntario que pasó a cabo y ha sufrido graves lesiones", lamentó Taiana, en diálogo con Radio 10, e insistió que se actuará con "dureza y firmeza" para relevar a los jefes de la unidad y profundizar el "movimiento de rechazo a los bautismos" dentro de las fuerzas armadas.
La Secretaría General del Ejército informó anoche que se dispuso la suspensión de dos oficiales y trece suboficiales que se desempeñaban en el Regimiento de Infantería de Monte 30, de acuerdo a lo dispuesto en el Código de Disciplina de las Fuerzas Armadas.
Sobre Verón, el Ejército indicó que "fue intervenido quirúrgicamente como consecuencia de lesiones en la columna vertebral y actualmente se encuentra estable en el sanatorio Boratti de la ciudad de Posadas".
El hecho ocurrió apenas dos semanas después de la muerte del subteniente Matías Ezequiel Chirino, un joven de 22 años al que le obligaron a celebrar junto a sus compañeros y jefes del Grupo de Artillería Nº 3 del Ejército Argentino su "bautismo" en la unidad militar de Paso de los Libres, ubicada a 370 kilómetros de la capital correntina. Matías había sido forzado a beber y comer de manera exagerada y luego a tirarse a la pileta.