En 2015, Sofía Pizzi y Alejandro Segura se conocieron en Tinder, una app de citas muchas veces considerada como un lugar de vínculos efímeros. Sin embargo, con los años los jóvenes no solo lograron fortalecer la relación sino que conformaron una familia que ahora cuenta con cinco hijos, a los que adoptaron en 2019.
En diálogo con Mediodía750, Sofía recordó el origen de la relación y reveló que, para ella, Tinder era “conocer a alguien” y no más que eso. Sin embargo, aseguró que luego de la segunda o tercera cita ambos ya sabían que querían "quedarse ahí”.
El deseo de ser madre
Además, Pizzi sostuvo que con Alejandro nunca se habían planteado la idea de ser padres, ya que ella “estaba enfocada" en su carrera y en lo laboral. Pero luego de dos años de convivencia, el tema empezó a surgir con asiduidad. Primero debieron atravesar dos años de estudios biológicos y un tratamiento de fertilización in vitro, que no fue exitoso. Un proceso “muy largo y agobiante”, en palabras de Sofía. Y fue en ese momento cuando se dieron cuenta de que podían sacarse la "mochila del mandato" de ser padres biológicos a cualquier costo y empezaron a abrazar con más fuerza la idea de la adopción.
“Los niños grandes son niños”
El más grande de sus hijos había decidido “separarse” de sus hermanos más pequeños, porque la mayoría de las personas que desea adoptar suele buscar bebés o niños y niñas de hasta 4 años. Así lo afirmó Sofía en AM750: “El 90% de los niños que hay en los hogares son más grandes que los de la segunda infancia”.
"Él no ha tenido una infancia normal y ha adoptado el rol de un adulto”, agregó. Y concluyó: "Yo insisto con esto: son niños. Tienen tantas primeras veces, desde la primera vez que los acompañamos a la escuela, la primera vez de un cumpleaños en familia. Hay tanto por vivir con estos niños de 12 o 13 años que es una lástima perder esa oportunidad de vivir, de ser padre y ellos pierdan ese derecho a una familia".