En una nueva jornada nacional de lucha, la Unidad Piquetera buscará hoy concretar una reunión con la nueva ministra de economía de la Nación, Silvina Batakis, a quien le solicitarán un bono compensación por inflación como refuerzo de ingreso, para jubilados, precarizados, monotributistas A y B, como así también programas sociales de $20.000 y el aumento del salario mínimo para que ningún trabajador quede por debajo de la línea de pobreza.

En Salta el lugar elegido para marchar será el Centro Cívico Grand Bourg (donde funciona la casa de gobierno), donde se concentrarán a las 10 de la mañana buscando ser recibidos por el ministro de Hacienda y Dervicios Públicos, Roberto Dib Ashur, dado que consideran que hasta ahora no tuvieron resultados satisfactorios en los encuentros que mantuvieron con la titular de la cartera de Desarrollo Social, Silvina Vargas.

Gabriela Cerrano, referente del Polo Obrero, dijo a Salta/12, que piden "módulos alimentarios y mercadería para los 90 merenderos que tenemos, donde comen unas 10.000 personas aproximadamente en toda la provincia".

“No obtuvimos nada con la ministra Vargas, porque dice no hay plata y que la provincia no le destina fondos, entonces a Dib Ashur le decimos que ponga la plata porque ya que dijo que tienen superávit, de qué sirve cuando hay gente en la extrema pobreza”, protestó. 

Además de la manifestación en la casa de gobierno, también se programaron cortes prolongados en las rutas del interior de la provincia con protestas y ollas populares.

Los piquetes tendrán lugar en localidades como Joaquín V. González, Las Lajitas, Apolinario Saravia, General Mosconi, Pichanal, General Guemes, Colonia Santa Rosa, Tartagal, Orán, Urundel e Hipólito Irigoyen. 

"Es triste optar entre quienes darles de comer"

Sara Siles, es referente de la organización William Cooke, que tiene presencia en buena parte de la provincia y cuenta con 60 servicios de asistencia, entre merenderos y comedores.

"Se asiste a más de 4 mil personas, siempre dando prioridad a niños, embarazadas y adultos mayores, pero es triste tener que optar entre quienes darles de comer, pero las madres prefieren que sus niños sean alimentados y en un país tan rico, no deberían suceder estas cosas”, lamentó en contacto con este medio.

Luego denunció: “enviamos notas, pero nos dicen que no hay plata, pero vemos que en los barrios circulan los bolsones de la mano de los punteros políticos del gobierno”.

No limitó el reclamo a la asistencia alimentaria, sino que agregó la exigencia de que "haya medicamentos y médicos en los hospitales", y destacó que "los directivos de las escuelas tienen que hacerse cargo de los alimentos, como sucede en Rivadavia, en El Zapallar, donde pasan dos meses y recién les mandan los alimentos, y en esa escuela se destinan 10 pesos por niño, y ese es su único alimento, y sabemos que muchos niños comen en las escuelas, y ahora en las vacaciones se quedaron sin esa alimentación”.

“Padecemos la falta de servicios básicos como ser el agua, tanto en el interior como en Capital, donde en barrios como Floresta o Ciudad del Milagro, solamente tienen agua tres horas”, cuestionó, al tiempo que añadió que “pasó el tiempo y seguimos solicitando viviendas, porque siguen sin tener tierras para el plan Mi Lote”. 

Para Sara Siles, “este gobierno es deficiente, pero según ellos tienen un superávit de 12 mil millones de pesos, sin embargo, eso no se ve reflejado, por eso queremos hacerles ver la realidad y que nos escuchen porque las familias no están llegando a fin de mes”.

"Para los funcionarios de Salta, el norte no existe"

La frase pertenece a Julia Rojas, integrante de TOrRe (Tabajadores Organizados para la Revolución), quienes tienen presencia en varios municipios del norte provincial.

“En Urundel brindamos la merienda los días martes, miércoles, viernes y sábados, pero también tenemos presencia en Colonia Santa Rosa, Pichanal, Orán y Tartagal, y nos arreglamos por el momento con mercadería que se mandó de Desarrollo Social, pero ya hace 4 meses que no nos están mandando y ahora vamos al municipio a pedir para solventar estos merenderos porque la cantidad de asistentes creció bastante con la crisis y la inflación que nos está tirando a todos”, relató.

Sobre quienes la acompañan en la organización, contó que “hay compañeros que salen a las 5 de la mañana y vuelven a las 19 de trabajar por mil pesos, que son para la comida del día y obviamente les falta, porque con la canasta básica que supera los 100 mil pesos, y un plan de 22 mil, no se llega a la cuarta parte de eso”.

Además, Rojas mencionó un conflicto que mantienen los trabajadores municipales con el intendente de Urundel, Víctor Caraita: "tenemos a los compañeros tomando la municipalidad porque no pueden hacer nada con un sueldo básico de $24 mil pesos que con suerte llega a los $33mil pesos".

"Ellos están con amenaza de despido por luchar por un salario digno, y encima el intendente les mintió que van a solucionar y les terminó mandado la infantería para reprimirlos", denunció.

Por último, la referente social aseguró que "hoy el merendero para los niños es una ayuda y para esos compañeros que hay días en los que no tienen qué darles de comer a sus hijos, y esto pasa en todos lados y todos estamos en la misma situación nadie porque está fuera de esta inflación, pero lamentablemente para los funcionarios de Salta el norte no existe".