Miles de taxistas italianos protestaron este jueves en Italia, en plena temporada turística y en medio de fuertes tensiones políticas en el gobierno, por la falta de un acuerdo con el Ejecutivo para cambiar un nuevo decreto que plantea la liberalización del sector. Las calles de las principales ciudades italianas se vaciaron de taxis por tercer día consecutivo después de la fallida reunión en Roma entre los representantes del sector y el ministro de Infraestructuras, Enrico Giovannini, para modificar uno de los artículos del nuevo proyecto de "ley de competencia" en el que se incluye la posibilidad de liberalizar el sector para "una mejor protección al consumidor".
El artículo apunta que el gobierno debe promover "la competencia, también en el otorgamiento de licencias, con el fin de estimular mayores estándares de calidad". Esto hizo saltar las alarmas de los taxistas que volvieron a manifestarse por tercer día consecutivo con pancartas y bengalas para pedir que el Ejecutivo escuche sus propuestas y con mensajes en contra de Uber.
