El nuevo titular de la Dirección General de Aduanas (DGA), Guillermo Michel, cruzó este lunes a los diputados de la Coalición Cívica Juan Manuel López y Paula Oliveto después de que los legisladores que responden a Elisa Carrió lo denunciaron ante la Oficina Anticorrupción por supuestas persecuciones a opositores durante su paso por la AFIP en el gobierno de Cristina Kirchner.
Según la denuncia, Michel, entonces subdirector general de Coordinación Técnico Institucional de la Administración, comandaba un “equipo especial de funcionarios para hacer seguimientos de adversarios políticos, empresarios, periodistas artistas y dirigentes” de la oposición.
Consultado por AM750 Michel dió una contundente respuesta: “Entiendo que más de un sector la única forma que tiene de hacer política es denunciando. Pero pasan un límite. Yo ya contesté a la Oficina Anticorrupción y estoy llamando a los dos diputados que hicieron la acusación, que obviamente se van a amparar en los fueros, pero lo voy a hacer igual”.
El funcionario aclaró que al asumir en los roles públicos se “tiene que estar a disposición de la justicia y dar explicaciones”. Y aclaró: “No solo eso es una burda mentira. En las causas donde se me acusa de persecución fui sobreseído. Al medio que planteó eso, que hizo esa operación, no solo le gané un juicio por daños y perjuicios, sino que ya logré la ejecución de la sentencia y le embargué el auto a la propietaria”.
“Hacer trampa tiene consecuencias”
Michel aseguró que al asumir en Aduana se encontró con “una organización que estaba trabajando bien, atacando las problemáticas”. Las problemáticas son las mismas de siempre: la especulación, los engaños y la trampa fácil, según enumeró. “La sobre y la subfacturación es algo reincidente en Argentina”, aseguró el funcionario.
Esto ocurre “sobre todo cuando hay una brecha cambiaria como la que existe hoy”. Pero no es algo novedoso, sino que “la primera comisión investigadora que armó Lisandro de la Torre fue para investigar esto vinculado a la carne”. “Se viene haciendo desde hace mucho tiempo”, explicó Michel.
Frente a este panorama, el hombre cercano a Sergio Massa planteó un cambio en la estrategia de la DGA: “Hay que fortalecer las herramientas vinculadas a la sobre y la subfacturación y tratar de comunicarlo. Hay que generar la percepción de riesgo en quienes tratan de cometer una irregularidad. Que el que hace trampa sienta que va a tener consecuencias”.