"Somo la verdadera mafia". El mensaje llegó pasadas a las 15 del 11 de junio al teléfono de una pizzería que tiene dos sucursales en la ciudad. Se trataba de una extorsión para exigir el pago de 20 mil dólares a cambio de no atacar los locales. La investigación a cargo del fiscal Pablo Socca derivó en un operativo de "entrega controlada" en el que la Agencia de Investigación Criminal detuvo a dos mujeres. Ayer, tanto ellas como dos presos de la cárcel de Piñero -que se contactaron con el dueño desde un celular dentro del penal- fueron imputados por formar parte del grupo extorsivo y quedaron en prisión preventiva por 45 días, por decisión de la jueza Trinidad Chiabrera. 

Socca les atribuyó a Cristian Sánchez y Joel Chelini el delito de extorsión en grado de tentativa; mientras que Sasha Colombo y Carolina Gómez -primas de Sánchez-, fueron acusadas como partícipes primarias del delito. 

Los dos detenidos alojados en un mismo pabellón de Piñero usaron un celular y "se contactaron mediante mensajes de Whatsapp con el dueño de un local comercial gastronómico y le solicitaron dinero en efectivo bajo amenaza contra su familia y su local comercial", reza la imputación. "Fijate qué pensás hacer con el tema de las pizzerías, ya sabemos todo de vos. Somos la verdadera mafia. Fijate que no es joda. Sino, te lo vamos a demostrar con hechos. 20 mil dólares, espero una respuesta favorable", le escribieron. 

Personal de la Brigada Operativa de AIC, por disposición del fiscal, tomó posesión del celular y se hizo pasar por la víctima para, mediante mensajes y audios de Whatsapp, pactar con los imputados la entrega del dinero, que debía ser arrojado en un contenedor de basura, en inmediaciones de calles Batlle Ordoñez y Dorrego, el 13 de julio, a las 15. 

A la hora y en el lugar pactado, el personal policial llegó al lugar y arrojó en el volquete una bolsa de consorcio que tenía dentro un paquete color papel madera con papeles varios, simulando tener el dinero que debían entregar. Inmediatamente, las dos mujeres aparecieron en escena, recogieron el paquete y cuando estaban yéndose, fueron detenidas.

Sobre el interno Sánchez, se indicó que está preso por robo calificado, con pedido de pena de 11 años de prisión; mientras que Chelini tiene causas por robo calificado y encubrimiento.