Con la reactivación de la ambiciosa obra del Gasoducto del Nordeste Argentino (GNEA), anunciada en Formosa por el gobernador Gildo Insfrán, y por la cual miles de habitantes de esa provincia accederán a la red de gas domiciliario por primera vez en la historia, se reavivaron las ilusiones para que zonas de Salta que no cuentan con este servicio, puedan cortar con tantos años de postergación.
En su génesis de 2003, en tiempos del gobierno de Néstor Kirchner, se pensó esta obra para llevar el gas a las provincias del noroeste y noreste del país que históricamente fueron electrodependientes.
Con un presente marcado por la falta de abastecimiento energético a raíz del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, y la necesidad de importar gas desde países limítrofes como Bolivia, la importancia de financiar una obra de esta envergadura volvió a ponerse en los primeros planos de la agenda política del gobierno nacional.
Ya a principios de este mes los diez gobernadores del Norte Grande Argentino, al respaldar la ejecución del gasoducto Néstor Kirchner como medida para "lograr soberanía energética y producir un fuerte ahorro de divisas a nivel nacional", reivindicaron el "desarrollo de la infraestructura necesaria para lograr el abastecimiento de gas natural en todo el país, (como) una política central para garantizar las mismas oportunidades para todas las provincias y un federalismo real".
Y destacaron en este sentido la obra del Gasoducto del NEA, con una traza original de 3.041 kilómetros, pero de la que solo se encuentran en operación 1.147 kilómetros. "Es por ello que solicitamos la realización de las obras que permitan garantizar la conexión a la red de las provincias de Corrientes y Misiones, y la finalización de las obras en las provincias de Salta, Formosa, y Chaco (ramales de aproximación). Para ello, es prioritario avanzar en la construcción de los dos ductos que permitan conectar el gasoducto Néstor Kirchner con los sistemas del NEA y del NOA", afirmaron.
Tras ese encuentro, el gobernador de Salta aprovechó el anuncio sobre el avance de la obra del gasoducto en territorio formoseño para reiterar su reclamo a las autoridades de Integración Energia Argentina SA (IEASA) para que se liciten y realicen las obras en el tramo comprendido en Salta.
Tras ese posteo, Gustavo Sáenz se reunió con el secretario de Energía de la Nación, Darío Martínez, quien aseguró que planteará la situación del GNEA para que en septiembre se re licite esta obra, que fue suspendida durante el gobierno de Mauricio Macri. Luego sobrevino el escándalo por el robo de caños por el que, entre otros, fue condenado el ex intendente de Aguaray, Enrique Prado.
Esta obra tiene pendiente la finalización del tendido en el tramo limítrofe Salta – Formosa. En principio el gasoducto transportaría gas proveniente de Bolivia, pero se prevé la alternativa de inyectar gas desde la cuenca neuquina. “En Salta hace más de un año que esperamos que IEASA y ENARSA cumplan con su palabra y compromiso con los salteños”, reprochó Sáenz con relación a esta obra que consideró “urgente y estratégica”.
La importancia para Salta
La secretaria de Minería y Energía de la provincia, Flavia Royón, usó las mismas palabras que el gobernador para referirse a la obra del Gasoducto del NEA: "estratégica", dado que en un futuro "posibilitaría que suba el gas neuquino de Vaca Muerta a la provincia de Salta, lo que daría previsibilidad para el desarrollo de la industria porque hoy estamos importando parte del gas que se necesita en el país desde Bolivia”.
“La cuenca de Bolivia que se comparte con Salta, ya es una cuenca madura, o sea que está en decline, entonces hay que pensar que de acá a unos años, vamos a estar con problemas deficitarios de gas, entonces se plantea que deberíamos tener la garantía de que se va a poder traer a Salta el gas de la cuenca neuquina”, explicó.
Aquí toma mayor preponderancia y trascendencia la necesidad de que se cristalice la obra del gasoducto Néstor Kirchner, la cual serviría de nexo para abastecer al resto del país.
Royón aseguró que “en un futuro, la cuenca neuquina va a ser superavitaria y va a poder abastecer de gas a todo el país, entonces se plantea que Salta debería tener acceso a esa seguridad y a esa soberanía energética, y para eso la obra tiene que actualizarse a través de un nuevo estudio de impacto ambiental para volver a licitarse”.
En Salta falta completar un tramo para conectar a la provincia con el Gasoducto NEA, lo que además traería aparejado la necesidad de mano de obra local.
Esta obra dependía de ENARGAS, que actualmente se llama Integración Energética Argentina SA (IEASA), y a su vez, de la Secretaría de Energía de la Nación, que ahora pasó a depender del Ministerio de Economía (hoy a cargo de Silvina Batakis).
Gestiones
Con la conformación del Consejo Regional del Norte Grande, compuesto por todos los gobernadores del noroeste y el noreste del país, se comenzaron a plantear problemáticas comunes de urgente solución que aquejan al norte del país.
En relación a esto, Flavia Royón contó que "hasta el día de hoy no hemos tenido novedades de esa re-licitación, y es un tema que el gobernador viene planteando desde el inicio de su gestión".
Además de plantearlo ante su pares del NOA y del Litoral, la funcionaria agregó que "(el gobernador) también hizo gestiones personales con Agustín Gerez, el presidente de Energía Argentina Sociedad Anónima (ENARSA), y en teoría era que el año pasado iban a avanzar con la nueva licitación, pero hasta ahora no tenemos novedades”.
En Formosa se desarrolló a principios de mes la Asamblea de Gobernadores del Norte Grande integrada por los mandatarios de las provincias de Formosa, Gildo Insfrán; Ricardo Quintela, La Rioja; Raúl Jalil, Catamarca; Gerardo Zamora, Santiago del Estero; Jorge Capitanich, Chaco; Osvaldo Jaldo, de Tucuman; Gustavo Sáenz, Salta; Oscar Herrera Ahuad, de Misiones; Gustavo Valdés de Corrientes y de Jujuy, Gerardo Morales.
Todos los gobernadores comparten preocupaciones y reivindicaciones en el documento en el cual avalaron el desarrollo del Gasoducto Néstor Kirchner en la Patagonia, reclamaron a la Nación que avance con las obras del Gasoducto "para poder llegar con las conexiones a los parques industriales, a comercios y redes domiciliarias para abaratar costos de producción y aumentar la producción de bienes y servicios e impulsar las exportaciones de las economías regionales, es de máxima prioridad".