Un miembro del equipo de la popular serie La Ley y el Orden: crimen organizado fue asesinado a tiros la madrugada de este martes en Nueva York, mientras se encontraba en el lugar de filmación de la tercera temporada del programa.
Según trascendió, el hombre, identificado por la Policía como Johnny Pizarro de 31 años, era trabajador de control de estacionamiento y fue atacado a tiros mientras estaba sentado en su auto: un desconocido se acercó, abrió la puerta del vehículo y le disparó en la cabeza y el cuello.
El auto estaba estacionado en North Henry Street, cerca de Norman Avenue, en el vecindario de Greenpoint, donde los productores de Universal Television tienen montado un set de filmación.
Tras el ataque, la víctima fue trasladada al Hospital Woodhull donde fue declarado muerto a su llegada. En tanto, la producción decidió suspender toda actividad por el resto del día.
“Nos entristeció mucho y nos conmocionó escuchar que uno de los miembros de nuestro equipo fue víctima de un crimen esta mañana y murió como resultado”, dijeron NBC y el estudio Universal Television en un comunicado conjunto.
“Estamos trabajando con la policía local mientras continúan investigando. Nuestros corazones están con su familia y amigos y les pedimos que respeten su privacidad durante este tiempo”, agregó el escrito.
Según la policía de Nueva York, Pizarro había llegado temprano al lugar -donde este martes se realizaría una filmación- como parte de la vigilancia del estacionamiento y la seguridad del set. Por el momento, no está claro si el asesino lo conocía ni tampoco está claro cuál podría ser el motivo del ataque.
Según el testimonio de algunos testigos, el asesino vestía una remera negra con capucha y pantalones también negros.
La Ley y el orden: crimen organizado es uno de los tres programas de La Ley y el orden que se transmiten actualmente en NBC, y todos se filman con frecuencia al aire libre en el área de Nueva York.
Además de Crimen organizado, también está La Ley y el orden: Unidad de víctimas especiales y La Ley y el orden, que volvió al aire para una temporada 21.
La serie sigue a los detectives de la Oficina de Control del Crimen Organizado mientras trabajan para desmantelar las empresas ilegales más violentas de la ciudad de Nueva York.