El dólar blue volvió a dar un salto de 10 pesos y finalizó en un nuevo pico de 301 pesos. La carrera del mercado por generar ruido financiero, impulsar las expectativas de devaluación y forzar un aumento brusco del tipo de cambio oficial sigue al rojo vivo. La especulación se observó también en los dólares financieros. El contado con liquidación durante la rueda de operaciones llegó a tocar 311 pesos pero al cierre se ubicó en 303 pesos, el mismo precio del lunes.
El Banco Central no pudo comprar reservas y anotó otra rueda de fuerte intervención. Se vendieron casi 120 millones de dólares, principalmente por la alta demanda de divisas para pagos de energía (rubro que se disparó con la llegada del invierno). En la rueda del lunes también había vendido más de 100 millones.
A diferencia de jornadas anteriores, los bonos soberanos registraron un leve rebote y permitieron bajar el riesgo país en 0,6 por ciento. El indicador del JP Morgan se ubicó en 2792 puntos. Algunos títulos en moneda extranjera llegaron a subir hasta 3 por ciento, pero vienen de acumular caídas de más del 15 por ciento en el mes y de más de 40 por ciento en lo que va del año. Esto ubica la paridad de los bonos en niveles del 20 por ciento, entre las más bajas del mundo.
Por el lado de las acciones de la bolsa porteña también hubo un aumento de las cotizaciones, que en parte se explica a la suba de los dólares financieros. Aunque algunas empresas argentinas que cotizan en Nueva York consiguieron computar un aumento de entre el 2 y el 4 por ciento.
La volatilidad de las firmas argentinas se explica por elementos locales pero también por la situación internacional, con una importante incertidumbre en los mercados globales del primer mundo. Bolsas como la de Estados Unidos acumularon fuertes caídas en los últimos meses debido al cambio de la política monetaria norteamericana, con la suba de la tasa de interés y el final del ciclo de superliquidez de dólares. Se trata de una tendencia que también comienza a verse en otros países y regiones desarrolladas.
Por caso la Unión Europea se encuentra por realizar su primer incremento de tasas de 25 puntos básicos en 11 años. La reunión del Banco Central de la zona euro se realizará este jueves, en la cual se definirá la suba, y se dará inicio a un cambio de régimen monetario que llevaba más de una década. Las medidas buscan apaciguar el salto de la inflación en Europa que se ubica en torno del 8 por ciento, en países acostumbrados a tener suba de precios anuales menores al 2 por ciento, y contener la devaluación del euro. La moneda de la Unión Europea se ubica respecto del dólar en su peor cotización de los últimos 20 años.
Volviendo a la situación local, el clima de presión financiera tiene impacto en distintas variables económicas. Entre ellas la inflación, que para el mes de julio se estima que podría dar un nuevo salto, luego de las remarcaciones que recibieron distintos precios en las primeras semanas del mes. Se trata de remarcaciones que ocurrieron luego de la corrida contra los bonos en pesos de mediados de junio y la posterior disparada del contado con liquidación y el dólar blue.
La suba de los dólares financieros e ilegales, con un dólar blue que este martes superó los 300 pesos, adelanta las intenciones de distintos sectores del mercado de potenciar el ruido y la inestabilidad del mercado interno, con el objetivo de conseguir una devaluación del tipo de cambio oficial utilizado para exportar.
Una apuesta que hace varias semanas parece mantenerse firme y tiene como principal sustento la dificultad para acumular reservas internacionales. La época del año es compleja debido a que bajan las liquidaciones del complejo agropecuario por el final de las ventas de la cosecha gruesa y aumenta la demanda de divisas para energía por el invierno. En lo que va de la semana el Banco Central acumula ventas en el mercado de cambios por casi 250 millones de dólares.