En las últimas horas un repudiable tuit negacionista de un economista macrista comenzó a viralizarse en las redes sociales. Se trata de un mensaje del analista económico Manuel Adorni, columnista de Radio Rivadavia e integrante de Republicanos Unidos.

El consultor, que se define como un hombre “capaz de filosas y profundas reflexiones que no dejan de lado un humor ácido y certeramente crítico” fue ampliamente repudiado cuando publicó en sus redes sociales la foto de un billete de 100 dólares con la consigna: “Estos si son 30.000. Fin”.

Uno de los primeros en repudiar este mensaje fue el titular de la CTA de los Trabajadores, Hugo Yasky, que le respondió: “No se puede ser más miserable. Ningunear el terrorismo de Estado, los compañeros muertos, los desaparecidos. En Argentina ser liberal, de derecha y negacionista es lo mismo”.

Entre los comentarios, además, había muchos que pedían por la urgente aprobación de una ley que penalice los discursos negacionistas de los crímenes de lesa humanidad durante la última dictadura cívico militar

Una ley para castigar los discursos negacionistas

En este sentido, el año pasado la abogada Valeria Carreras presentó un proyecto en esta dirección y elevó un pedido al Colegio Público de Abogados donde requiere su "apoyo y acompañamiento".

El proyecto de ley busca adjudicar "responsabilidades ulteriores" y "sancionar con multa significativa" a la expresión de discursos que "nieguen, justifiquen, minimicen hagan apología o glorificación de los delitos de lesa humanidad ocurridos en Argentina en el período entre los días 24 de marzo de 1976 y el 30-10-1983 cometidos por agentes del Estado", según dice el texto presentado.

“Dícese de facho”

El año pasado Adorni publicó un sugestivo tuit en el que repasó algunos atributos de lo que considera “facho”, dando a entender que está hablando de descripciones que lo definen a sí mismo: “Dícese de aquél que se desloma trabajando pretendiendo que no se le den planes sociales ni a piqueteros, ni a extranjeros, ni a vagos. También pretende que un empleado público no cobre más que él. Además quiere que los policías tengan más poder que los delincuentes”.