Alberto Fernández habla en la cumbre del Mercosur

"El Mercosur debe vivir muchos años más, debe vivir siempre"

Tras señalar las potencialidades de un eventual acuerdo regional para exportar gas y alimentos, Fernández retomó uno de los temas más tensos de la jornada: la decisión de Uruguay de avanzar en un tratado de Libre Comercio con China. 

"Lo único que pido a todos es que no nos ilusione la idea de separarnos, que no nos ilusione la idea de buscar soluciones individuales, de salir con un proyecto propio que me alcance a mí, porque todo eso es de corto aliento", dijo primero, sin mencionar el acuerdo.

Y agregó, en un mensaje directo a Uruguay: "Yo no me niego en nada a analizar todo lo que haya que analizar en eso que mi querido Luis Lacalle Pou llama flexibilización del Mercosur, porque me doy cuenta que estoy viviendo en un mundo que está cambiando y que en ese cambio estamos caminando en la cornisa. Y yo no quiero que ninguno de nosotros se caiga de la cornisa".

Pero "mañana siempre es mejor y lo podemos empezar a construir hoy, en unidad, haciéndonos partícipes de lo que el otro está haciendo", planteó Fernández. "No sabemos cuándo termina la guerra, cuánta pobreza va a deparar esa guerra. Entonces, ¿por qué no unimos esfuerzos para que nos sea lo menos doloroso posible?", expresó.

"Así como hicimos con Singapur, que fue posible, si existiera la posibilidad de pensar en que China tuviera un acuerdo con el Mercosur, ¿Por qué no lo analizamos juntos?", reflexionó. "Porque va a ser más importante el acuerdo si metemos a los 200 millones de habitantes que tiene Brasil", ejemplificó.

La propuesta de Argentina, dijo a modo de cierre, es "empezar a fundar otro Mercosur, donde nos prestemos las potencias que somos y tenemos para que todos seamos más potentes". 

"Los invito a pensar en eso antes que pensar lo que algunos diarios titularon hace 2 años cuando Luis habló de su idea de pensar en China: ‘el Mercosur se muere’. No, el Mercosur debe vivir muchos años más, debe vivir siempre. Y América Latina y el Caribe deben estar unidas de una vez y para siempre, porque el mundo geopolíticamente ha cambiado. Y si no lo entendemos y creemos que cada uno puede salvarse por sí solo, no se habrá entendido la enseñanza del Papa Francisco: nadie se salva solo", concluyó.

"Yo quiero una sociedad donde todos ganen"

Durante su intervención en la cumbre del Mercosur, Fernández se refirió a "la posibilidad de hacer hidrógeno verde" y vendérselo a Europa. "En Argentina tenemos un proyecto de 8600 millones de dólares que ya se ha iniciado. Tenemos la segunda reserva de gas no convencional que nos permite exportar gas en cantidades inmensas. ¿Por qué no nos ponemos a trabajar juntos? Porque Argentina tiene el gas y por ahí alguno de ustedes puede ayudar con el financiamiento", propuso.

En ese marco, reconoció que hay "asimetrías que Paraguay y Uruguay tienen respecto a Brasil y Argentina" y dijo que "eso hay que resolverlo". "¿Por qué no vemos de hacer juntos un proyecto como el de Argentina pero donde ustedes sean socios y ustedes también ganen? A mí no me gusta explotar asimetrías, yo quiero una sociedad donde todos ganen".

"Estamos en un continente que tiene lo que el mundo busca para el mañana y si no nos damos cuenta que tenemos que estar más unidos que nunca, vamos a cometer el peor de los errores", insistió.

"Tenemos por delante una oportunidad formidable para ir en socorro del mundo hambriento"

Ante el escenario bélico actual, añadió el mandatario, "las dos grandes preocupaciones es de dónde vamos a sacar alimento y de dónde vamos a sacar la energía". 

Frente a esto, continuó Fernández, hay que tener en cuenta que "Paraguay, Uruguay, Brasil y Argentinas somos enormes productores de alimentos", por lo tanto "tenemos por delante una oportunidad formidable para ir en socorro del mundo hambriento, si es que sabemos ponernos de acuerdo para aprovechar la oportunidad".

Además de ser grandes proveedores de alimentos, siguió el mandatario, "podemos ser grandes proveedores de energía" ya que "entre Bolivia, Chile y Argentina tenemos las mayores reservas de litio que hay en el mundo". 

"¿Qué pasaría si nos ponemos de acuerdo a trabajar en una unión de litio que nos permita producir y darle al mundo el litio que necesita y está demandando?", le preguntó a sus pares. 

"Un continente sin vocación de guerra"

En otro tramo de su discurso, Fernández destacó que si bien "vivimos en el continente más desigual", se trata de "un continente sin vocación de guerra" y "eso es una gran ventaja para los tiempos que vivimos".

Sin embargo, "así como en el norte vuelan balas, en el sur vuela el hambre. Y eso es lo que no podemos seguir permitiendo", remarcó. "Todos los que somos parte del continente queremos la paz. Pero lo que debemos querer además de la paz es un continente más justo, más equilibrado, más igualitario, donde podamos hablar más y tomar decisiones de conjunto, porque el mundo que se viene es el mundo de las regiones, no el mundo de los países".

En ese marco, insistió en que "debemos hacer más fuerte nuestra región, porque mientras hablamos todo esto el cambio climático sigue ocurriendo" y  "lo padece Centroamérica, que antes eran zonas fértiles y hoy son zonas áridas y perdidas para la producción agropecuaria" o "el Caribe, donde todos los días sus islas se hunden un poco más". 

"El mundo va a enfrentar una hambruna que va a lastimar a 300 millones de habitantes"

"La FAO (la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) anunció hace un mes atrás que como consecuencia de este conflicto bélico el mundo va a enfrentar una hambruna que va a lastimar a 300 millones de habitantes. ¿Dónde están esos habitantes? En nuestro hemisferio", manifestó Alberto Fernández.

"Frente a semejante realidad, ¿no tenemos que ver cómo nos protegemos, cómo garantizamos que esto no ocurra?", inquirió.

"Los países del hemisferio sur somos las principales víctimas"

El jefe de Estado recordó que durante el G7 advirtió que los países del hemisferio sur "somos las principales víctimas" y no se los llamó a discutir sobre la guerra entre Rusia y Ucrania. "Y allí tuvieron la inteligencia y generosidad de invitar al presidente de la Unión Africana, de invitar al primer ministro de India y de invitarme a mí como presidente de la CELAC", afirmó.

Y añadió: "Hay que escuchar a Europa decir que se queda sin energía.Hay que escuchar a Europa decir que sus inflaciones aumentan el 300, 400, 500 por ciento. Hay que escuchar a Estados Unidos decir que su inflación aumenta un 800 por ciento (...). Hay que ver cómo de repente el carbón volvió a ser importante cuando todos veníamos hablamos de la necesidad de lo verde, de lo ambiental".

Asimismo, aseguró que "tenemos que darnos cuenta del mundo en el que estamos"porque si no "nos vamos a equivocar".

"El hambre empezó a asediar al mundo entero"

Alberto Fernández señaló que debido a la guerra entre Rusia y Ucrania "el mundo vive una enorme complejidad".

"Cuando Rusia y Ucrania entraron en guerra lo que hay que tener en claro es que salieron del mercado millones de toneladas de trigo, de cereales, de girasol, que el 75 por ciento del aceite que se consume en Europa y viene de Ucrania desapareció también y que el hambre empezó a asediar al mundo entero".

"La pandemia generó un año de quiebre en la economía mundial"

Alberto Fernández advirtió en la cumbre del Mercosur que "la pandemia generó un año de quiebre en la economía mundial". "Durante un año la economía mundial se paralizó y todos lo padecimos, otros más y otro menos, pero nadie quedó a salvo". 

El presidente señaló que "empezamos a recuperarnos al año siguiente, algunos más y otros menos" y que "cuando la recuperación paulatina empezaba a aparecer que era sostenida se desata una guerra en el hemisferio norte que tiene las consecuencias del tiempo que vivimos". 

"¿Saben qué ha cambiado desde que el Mercosur se fundó? Lo que más cambió es que en aquellos días la globalización estaba en sus albores y uno no entendía bien la dimensión, pero hoy en día la globalización funciona plenamente y lo que ocurre en cualquier latitud del mundo repercute inexorablemente sobre todas las regiones del mundo", dijo.

"El tiempo que nos ha tocado gobernar es un tiempo singularmente difícil en el mundo"

"La ocasión sirve para que reflexionemos juntos los desafíos que tenemos por delante como pueblos latinoamericanos que somos -afirmó el presidente Alberto Fernández-. El tiempo que nos ha tocado gobernar es un tiempo singularmente difícil en el mundo".

Y añadió: "Lamentablemente esto es producto de lo que el mundo ha vivido, de lo que tal vez no todos tomamos cabal dimensión de la gravedad del problema. Argentina heredó lo que heredó, no voy a aburrirlos con la situación económica que vivió y el nivel de endeudamiento que recibió. Pero a 99 días de ser presidente nos encontramos con una pandemia que asoló al mundo, que lo encontró desguarnecido. Muchos de nuestros países teníamos el sistema de salud desarmado y hubo que hacer un enorme esfuerzo por volver a reconstruir esos sistemas y poder hacer frente a lo que la pandemia generaba".