"Una canción tiene capas infinitas de historia", dice Joaquín Mustafá Torres, creador y voz de En la Zona podcast. Musta tiene 27 años, es realizador audiovisual, también productor y cantante, y un nerd de la música de toda la vida. Siempre había querido tener un programa de radio: "Me copaba el mood de estar en un estudio y comunicar sobre música sin necesidad de ser visto, pero sí escuchado", cuenta.
El podcast Switched on Pop, más específicamente el episodio donde analizan una canción de Taylor Swift, fue el primer disparador de lo que sería después En la Zona. "Son especialistas y hablaban desde un lado muy técnico, y me re gustaba porque era un análisis muy deep: por qué usa tal nota para transmitir cierta emoción, por ejemplo." Eso lo llevó a meterse de lleno en el mundo de los podcasts de análisis de canciones, y luego a querer hacer el propio.
Siempre fue un obsesivo escuchador de las pistas multitrack de sus canciones favoritas. Le gustaba buscarlas y, si estaban en internet, desentrañar cada arreglo, cada sonido, cada decisión. De eso se trata En la Zona, que toma su nombre de aquel álbum de Britney del año 2003. Es un podcast realizado íntegramente por Torres, que cuenta hasta ahora con siete episodios de duración variable (nunca cortos) donde analiza canciones pop de alta rotación, desde diferentes perspectivas siempre exhaustivas.
Los análisis suelen girar alrededor de entrevistas donde les artistas y demás personas involucradas en la canción describen sus procesos, así como de la escucha de las partes de los temas por separado para detallar qué sucede con la voz, los sintetizadores o los beats. Pero En la Zona tampoco es pura data dura: el análisis musical va constantemente mechado (nunca sin sentido), con un poco de chisme, un poco de anécdota, un poco de apreciación personal, y también inserts sonoros al modo meme.
A Musta le interesa tratar al pop como cosa seria, analizar sus elementos, estructuras y letras, poner en contexto su sonido. Aplicarle una nerdeada que no es tan común a la hora de hablar de hits pop, pero sí al hablar de rock o de cualquier otro género considerado serio. "Para mí está re bueno darle esa seriedad. También, por otro lado, hay podcasts muy haters con el pop, precisamente por esto de no ser la música seria o la buena música.", comparte.
EEso me indignó, sentía que no estaba aportando nada. Y me parece que lo bueno de En la Zona, como de otros podcasts que escucho, es eso de celebrar a estos artistas y mostrar el laburo que hacen, todo lo que implica exponerse, todo el tiempo que lleva crear esas canciones, las capas que tienen y todos los obstáculos hasta el resultado final. Aunque ellas, las popstars, no necesitan que yo las reivindique. Pero las amo y me parece que está bueno mostrarlo y resaltarlo."
► Escúchame entre el ruido
El podcast estimula algo tan elemental como precioso: la escucha atenta. Musta lo hace naturalmente y lo disfruta, y trata de brindar herramientas para que quienes se interesen puedan hacerlo también. "De haber escuchado tanta música toda la vida, fui desarrollando algo así como sub-escuchas: escuchar, pero escuchar detrás de lo que está en la primera oída. Tiene que ver con escuchar muchos instrumentales y multitracks, una vez que escuchás un stem por separado no podés desescucharlo en la canción entera." Componer sus propias canciones también ayuda, aunque su materia siempre fue más la curiosidad y la búsqueda que la formación académica en música.
¿Cómo se hace un podcast de estas características? Encontrar los stems, o los tracks separados de himnos pop mainstream, no siempre es tarea sencilla. Torres tiene una respuesta: Youtube. Pero esta dificultad también limita un poco el repertorio. "O no existen los tracks, o son muy viejos y se escuchan muy mal", lamenta. Y pone por ejemplo el capítulo en torno a las Spice Girls. "Se escuchan re pedorros, pero al menos están separados."
Cada capítulo se estructura alrededor del material que consigue sobre la canción en cuestión. A estructurar, muchas veces, lo ayudan las entrevistas a las artistas. "Me gusta ir de lo nerd a lo más popular, lo más chimentero. Porque si bien hay mucha gente que lo escucha que es muy fan de la música, hay otra que no tanto, y me parece bueno que sea inclusivo en ese sentido."
En la Zona está producido, escrito, grabado, editado y mezclado por él. "Cada capítulo es un mundo", explica. Y de hecho cada uno tiene su propio enfoque. Para el de Christina Aguilera, por ejemplo, encontró una nota donde el productor explicaba de qué sintetizador provenía cada sonido de la canción. En el de Telephone, de Beyoncé y Gaga, por el contrario, recupera anécdotas detrás de la grabación contadas por el productor Darkchild.
En el futuro quiere incluir capítulos especiales con entrevistas a cantantes pop locales, para sumar un poco de interacción real y también algo de español a un podcast principalmente centrado en música anglosajona. "Me gustaría saber sobre sus procesos creativos, sus influencias, qué les gustaba cuando eran chicos, qué escuchan ahora... que cuenten cómo era tal letra al principio", imagina. "Tambien me gustaría que haya un momento medio llamada telefónica de algún amigue fanático de alguna queen, y que aparezca su palabra de especialista. Como es una charla conmigo todo el tiempo, está bueno que cada tanto haya un interlocutor." Ese feedback con amigues, reconoce, es fundamental. Sus comentarios lo ayudan a pulir y mejorar el podcast episodio tras episodio.
Y entre algunos de los temas que le gustaría desglosar, pero de los que no encuentra multitrack, se encuentran varios clásicos de la edad dorada del teen pop, y por lo tanto de su infancia: Everybody de Backstreet Boys, Bye Bye Bye de N'Sync, Turn off the Light de Nelly Furtado y Una noche más de J.Lo.
► Subido a las plataformas
En paralelo al desarrollo de la idea en Spotify, Musta encontró en TikTok un gran canal para promocionar el podcast y ahí puede explotar un recurso que siempre quiso usar: los mashups de En la Zona, aprovechando para jugar y hacer un poco de collage entre estos stems que va recolectando.
A mediano plazo le gustaría abrir el podcast a otras plataformas y desarrollar un En La Zona TV, por ejemplo. "Hay cosas que si no es visualmente me cuesta mucho explicarlas", indica. Por ejemplo, analizar los videoclips. "Ya es hora de que YouTube se deje de romper las pelotas y nos deje usar la música, y de alguna manera les de las regalías a les músiques. Si pudiera usar eso ya tendría un canal, podría mostrar los proyectos de Ableton y la gente podría ver las entrevistas subtituladas", lamenta. "Abriría mucho más el juego."
Hasta el momento, En la Zona cubrió exclusivamente canciones de pop divas. Ésto no quiere decir que no vayan a existir episodios sobre cantantes masculinos. De hecho, es fan de las boybands, de The Weeknd y de Justin Bieber. Pero se dio naturalmente de esta manera porque el pop cantado por mujeres es el lugar seguro de Mustafá. "Como hombre homosexual amante del pop, paradójicamente hay algo muy magnético en las mujeres para nosotros. Hay algo en el delivery de las pop divas que es muy diferente al de los pop divos. Las pop divas la rompen mucho más y se esfuerzan mucho más, hay mucha más exigencia para ellas: tienen que bailar, cantar, ser hermosas, darlo todo. Y nosotros lo mínimo que podemos hacer es celebrar todo eso."
El último capítulo está dedicado a thank u, next, de Ariana Grande. Torres es fanático suyo y hacía tiempo que buscaba cual sería su canción elegida para En la Zona. Fue desayunando un domingo de resaca que el amigo con quien vive se lo sugirió. "Busqué los stems y estaban, y cuando empecé a investigar no paraba de aparecer data, fue un poco abrumador." Y, dicho y hecho, es el capítulo más largo, con una hora y 42 minutos.
Thank u, next es una canción sobre la que se puede decir mucho, a nivel musical y a nivel chimento también, porque fue la canción que Grande escribió y lanzó luego de la muerte de su ex Mac Miller y de separarse de su prometido de entonces, Pete Davidson, a quien le había dedicado su álbum anterior. "Más allá de que la canción es iconic porque la frase es muy pegadiza, también por todo el contexto que la involucra", explica.
En ese capítulo, Musta no solo se centró en Ariana sino también en las carreras musicales y background de les productores y escritores que trabajaron en el tema, así como de la directora del videoclip. La tela para cortar era infinita. "Se volvió un capítulo muy completo", cuenta satisfecho.
► Nerds de lo icónico
Icónico es un concepto sobre el que se vuelve una y otra vez, tanto en el podcast como en la entrevista. ¿Qué significado le da el podcaster? "Algo que es por un lado único, por otro lado eterno y algo que marca un antes y un después." Y se ríe antes de agregar: "Me produce mucho placer decir iconic, legend. Están muy de moda, extremadamente, pero me parece que se lo merecen".
Musta dice cuando algo no le gusta mucho, sea un arreglo, un sonido o algo que él mismo dijo. Sus oyentes saben que se quedó disconforme con el capítulo de Umbrella (y de hecho el episodio de Telephone comienza con él quejándose de eso). Pero recientemente, en un bar, un chico lo reconoció y le dijo: "Dejá de bardear el capítulo de Umbrella, a mí me re gustó". En general, la recepción que tuvo En la Zona lo tiene muy contento y satisfecho, sobre todo por notar que allá afuera está lleno de nerds del pop: "Fue muy valioso ver que a muchas personas también les interesa, y sienten lo mismo".
Y con su música, también: Musta es principalmente autodidacta. Pero como con todo, su insaciable sed de conocimiento lo lleva constantemente a buscar aprendizaje de diversas fuentes. "Nunca fue un aprendizaje tan consciente. Lo fui más bien aprehendiendo", ríe. "Antes para mí hacer una canción era un proceso mucho más fácil, y ahora que ya escuché muchas canciones y presto atención a cómo están mezcladas, ahora que entiendo la diferencia entre mix y master, terminar una canción me cuesta mucho más."
Hoy está coproduciendo sus nuevos temas, algunos junto a La Finesse y otros con Ezequiel Tarica, los cuales podrán encontrarse en agosto en Spotify bajo el nombre artístico de Müsta. A partir de cierto momento del proceso, considera que el instrumental llega a un techo y requiere el trabajo de un productor. "También porque a veces puedo llegar a ser extremadamente pop y me gusta que alguien pueda agarrar ese sonido un poco cursi y volverlo más sobrio. Me sirven ese balance y esa mirada externa", confiesa. Sí se siente más un productor de voces: le gusta arreglarlas y efectearlas él mismo.
Hasta ahora solo lanzó canciones en inglés, pero las que se vienen son en español. "Algunas son bastante más emocionales y otras son mucho más ntss ntss ntss. Y eventualmente va a haber un videoclip con su coreografía correspondiente, cual Backstreet Boy argentino", dice quien tiene un respeto devoto por los grandes símbolos del pop anglosajón. "Algunos serán más houseros, otros más reggaetoneros, otros más baladescos, otros más raperos, pero principalmente, como el podcast, puro pop."