Este lunes se lleva cabo en la ciudad boliviana de Santa Cruz un paro cívico de 24 horas convocado por Comité Interinstitucional Impulsor del Censo, para exigirle al gobierno que el Censo Nacional de Población y Vivienda se realice el 28 de junio de 2023 y no en mayo de 2024. La decisión de postergar el censo la tomó el Consejo Nacional de Autonomías, un ámbito que reúne a distintos niveles de gobierno.
El presidente del Comité y rector de la Universidad Gabriel René Moreno, Vicente Cuéllar, dijo que la suspensión de actividades se resolvió tras el silencio del gobierno de Luis Arce. “El paro se ratifica para el lunes por un mandato de la cumbre de instituciones que se reunió el viernes 15 de julio en instalaciones de esta universidad”, señaló al diario El Deber.
El departamento de Santa Cruz, ubicado al este del país, es gobernado desde 2021 por Luis Fernando Camacho, del sector Creemos, un partido de extrema derecha opositor al gobierno nacional (MAS).
Los transportistas y gremialistas del Plan 3000 -uno de los quince distritos que conforman el municipio de Santa Cruz de la Sierra-, rechazaron el “paro político”. El dirigente de los transportistas, Édgar Fernández, dijo que “por los caprichos” de Camacho no se pueden perder “más de 32 millones de dólares” en un día de paro.
Según el gremialista, no se ha concluido con los límites entre municipios. “De los 56 municipios, solamente 6 tienen hasta este momento todos los límites saneados. Es decir, 50 están en conflicto de límites”, señaló. “Es el gobernador el que debe solucionar el problema de los límites antes de ir a un censo, por lo tanto, el Plan 3000 le dice no al paro”, afirmó Fernández.
Al paro se adhiere la Cámara de Industria, Comercio, Servicios y Turismo de Santa Cruz, la Cámara Agropecuaria del Oriente, la Federación de Empresarios Privados de Santa Cruz, y la Asociación de Supermercados.
Por otra parte, la dirección departamental del MAS convocó a una movilización en respaldo a Arce, prevista para este lunes las 16:00 (GMT-4) en Santa Cruz.
“Intereses políticos”
Arce lamentó que existan "intereses estrictamente políticos", que distorsionen “el objetivo que tiene un censo”, tras las críticas de la oposición. El presidente aseguró que con la medición se sabrá cuánta población hay en Bolivia, dónde vive y cómo vive, “para que, en base a eso, se pueda planificar y hacer política de Estado”.
El mandatario aseguró que “el grueso” del trabajo es el “levantamiento de la cartografía”, porque en la medición de 2012 no se realizó. “Es como empezar prácticamente de cero y es por eso que se llevó para más adelante la realización del censo”, puntualizó este sábado en radio San Gabriel.
Además, el presidente sumó la migración de ciudadanos dentro del país, que se desarrolla entre octubre y marzo, por la zafra de las cosechas. Según Arce, si el censo se hiciera durante esos meses daría un resultado “artificial” sobre la cantidad de población que reside en las distintas regiones. “Por eso tiene que ser en mayo o junio, que es el período en que la gente regresa”, explicó.
“Hay que pensar en todos los elementos técnicos, que no necesariamente son como algunos quieren manejar como estrictamente políticos. Aquí se está buscando una fecha en la que realmente la fotografía que saquemos del censo sea la que nos sirva para hacer políticas económicas y sociales en favor del país”, aseguró Arce.