Ayer se cumplió la orden y Eva “Higui” De Jesús quedó en libertad al dejar el penal de Magdalena, donde había sido trasladada. La mujer sigue procesada con la calificación de homicidio simple, mientras que su defensa insiste en que sea absuelta y que su caso sea tratado como un homicidio en defensa propia. En octubre pasado, en San Martín, Higui fue atacada por lesbiana, por una patota de diez hombres que pretendían “hacerla mujer” al violarla. Tenía un cuchillo guardado con el que mató a uno de sus atacantes.
En un audio grabado al momento de su salida se la escucha gritar “¡Hola chicas!¡Ya estoy afuera!¡Soy Higui chicas!¡No lo puedo creer!”. El audio se viralizó en las redes y tuvo como respuestas comentarios que relataban la emoción provocada al escucharla gritar su libertad.
También circuló una carta escrita por ella para La Garganta Poderosa, luego de su libertad y en la que refiere el maltrato que recibió de parte de la Justicia. “Y sí, por ser lesbiana debí soportar muchas agresiones; tantas que, llegado un punto, no me quedó otra que mudarme –relata en el texto–. Pero no fue suficiente, ni eso alcanzó para evitar que me atacaran con total impunidad: la Justicia portándose mal conmigo y mis atacantes en libertad. ¿Por qué todo esto? ¿Por qué tantos meses en cana? Sí, por supuesto, ¡por pobre y por lesbiana!”.
El 16 de octubre del año pasado, Higui fue atacada por una patota en el barrio Mariló, de San Martín. La venían persiguiendo desde hacía años y pese a que se había mudado de barrio. En la calle estaba Cristian Rubén Espósito, quien se le lanzó encima junto a sus compañeros. Higui se defendió con un cuchillo y lo mató.